Por fin empezamos a entendernos. El Chevrolet Sonic no es más que la versión norteamericana del Chevrolet Aveo, un utilitario que hereda el legado del Daewoo Kalos y sus posteriores lavados de cara e incluso remarcados. Se ha presentado en el Salón de Detroit con dos atractivas carrocerías.
Por un lado tenemos un subcompacto al uso, el típico cinco puertas, pero con la maneta trasera oculta en el marco de la ventanilla. Esta solución de diseño empieza a ser relativamente frecuente. El coche es muy expresivo, arroja una agresividad poco vista en el segmento B. Han acertado con el diseño.
Por otro lado tenemos un precioso sedán, que nada más verlo, me ha hecho replantearme eso de comprar aglún día un sedán de segmento B, que suelen ser medios de transporte sin personalidad. Comparado con el Chevrolet Aveo 4p actual, es que no tiene nada que ver, parezca mentira que sea del mismo fabricante.
Como podemos ver en esta vista de perfil, las llantas de hasta 17 pulgadas le sientan como un guante. No vemos superficies planas, es anguloso, con algo de músculo, un cambio de mentalidad muy considerable en el diseño. Este ya no tiene nada de coreano, se fabricará en Estados Unidos para ese mercado.
Por otro lado, las versiones americanas del Aveo vienen con motores que tranquilamente hacen la competencia a los utilitarios más picantes de Europa, porque las dos posibilidades se mueven en el entorno de los 140 pepinos. En serio, esto ya no tiene pinta de coche baratito y sencillito para economías modestas.
Los nuevos Sonic tienen mejoras en su comportamiento según el fabricante, han querido hacer un coche divertido, aunque por otro lado siguen recurriendo a soluciones técnicas de dudosa defensa, como un eje trasero de torsión y frenos de tambor servoasistidos... ¿con esa potencia?
Por dentro los Sonic se parecen más que nunca al Cruze, el interior es más digno del segmento C que del B. Se nota una intención por esmerarse en cada detalle. Ahora me estoy acordando del primer Chevrolet Kalos, y en comparación, hablamos de que antes era un coche de juguete. Esto ciertamente no tiene nada que ver.
Se vislumbra cuero, detalles en buenos materiales, un volante bien hecho, un novedoso tablero de instrumentos analógico/digital tipo motocicleta, climatizador de aspecto moderno, huecos portaobjetos en condiciones, dos guanteras, mandos en el volante con varias funciones, piezas heredadas de coches más caros que este…
También hay soluciones de equipamiento impensables para un Aveo/Sonic, como asientos calefactados, teléfono integrado, un cambio automático más moderno que del Jurásico (cinco marchas), ¡10! airbags (la seguridad del Aveo Sedan actual es para echarse a llorar), volante regulable en altura y profundidad, climatización estacionaria, techo panorámico…
Alguno me notará emocionado. Lo estoy. Me parece uno de los coches de segmento B más bonitos que he visto, que rompe con muchos tópicos, especialmente con lo que comporta un Aveo actual. Han querido subir de segmento pero manteniendo la talla “P”. La americanización le ha venido de perlas.
También se ha presentado en dicho salón un concept de altas prestaciones del que no han proporcionado un solo detalle, el Sonic Z spec Concept. Se puede intuir que se tratará de una versión de estética agresiva, aunque luego lo que haya bajo el capot no cambie respecto a un modelo normal. Existe el precedente del Chevrolet Kalos Sport.
La capacidad de maletero del sedán es muy generosa, 397 litros (medición americana), y 539 litros para el compacto (hasta el techo). La capacidad máxima del compacto es de 869 litros abatiendo asientos. La habitabilidad es casi igual, el sedán es algo más bajito en las plazas traseras.
Motores del Chevrolet Sonic
Para competir con su principal rival, el Ford Fiesta, lo hacen a la americana. Hay dos motores para elegir, los dos con casi 140 CV. Eso son 20 jacos más de los que hace gala el Fiesta 1.6 (no lo venden con menos). Por un lado está un 1.4 Turbo (138 CV) y por otro un 1.8 atmosférico (135 CV) failsafe, que gasta más y ofrece menos par.
El 1.8 tiene un cambio manual de cinco velocidades o un automático de seis, mientras que el Turbo lleva uno manual de seis. El motor Turbo ofrece 200 Nm entre 1.850 y 4.900 RPM, mientras que el otro se queda en 167 Nm a 3.800 RPM, aunque tiene el 90% del par entre 2.400 y 6.500 RPM. El mayor par permite marchas más largas.
De hecho, la sexta del 1.4 Turbo es bastante más larga que la quinta, que coincide en desarrollo con la quinta del atmosférico manual o la sexta del automático. Los consumos no se han facilitado. Ambos son de inyección electrónica multipunto, indirecta, y cortan a 6.500 RPM.
Si trajesen el Sedan a España, con el motor 1.4 Turbo y encima con la posibilidad de poner GLP... creo que se habrían ganado un cliente.
NOTA: Todos los datos se refieren al mercado norteamericano, las versiones para Europa no serán tan “guapas”, por ejemplo en el aspecto de las motorizaciones.
En Motorpasión | Chevrolet Aveo, bautizado como Sonic en USA
