La marca Audi está dispuesta a hacer como la silicona, tapar todos los huecos del mercado en los que no está, partiendo del escalón Premium. Según un diario holandés, todas estas denominaciones acaban de ser registradas, lo que sugiere que se materializarán en modelos a medio plazo.
De todas ellas, una se recupera del pasado, porque ya existió: el Audi S2. El nuevo podrá ser bien un coupé derivado del futuro A2, o algún derivado bonito del A3. Las demás son nuevas y nos dan pistas sobre los modelos que van a ir apareciendo.
Q6 y Q8 representan modelos por debajo y por encima del Audi Q7, hablamos de SUV y con tracción total quattro. El Q8 puede que sea algo pensado para Estados Unidos, Rusia, China y mercados árabes, un full-size SUV para competir con los Cañonero existentes, como Cadillac Escalade o Lexus LX.
Volviendo a las tallas inferiores, R6 sugiere un deportivo por debajo del Audi R8, todas las especulaciones están abiertas, yo creo que será de motor central, aunque más asequible. El RS1 sugiere una versión salvaje en la carrocería del Audi A1, y no me atrevo a pensar en potencias aún.
Por último, se esperan derivados del buque insignia, el Audi A8. RS8 debería implicar una versión superlativa en prestaciones, y no es que los A8 vayan precisamente cojos en ese sentido. El más gordo hasta la fecha es el Audi S8 (4.0 V8 con 520 CV), pero en la guerra por la potencia no parece suficiente.
En cuanto al S9, es probable que sea un modelo con el mismo planteamiento que el Porsche Panamera, una berlina de tipo coupé, pero con cuatro o cinco plazas. El A9 no existe, ni hay información confirmada alguna sobre él. De todos los modelos mencionados, la espera media será de 2-3 años, porque las denominaciones caducan si no se usan.
Vía | Autobild
Fuente | De Telegraaf (en holandés)