Hace unas semanas Audi mostraba los primeros bocetos de su propuesta eléctrica y autónoma para el Salón de Shanghái, y ahora ya lo podemos ver al natural. Se llama Audi AI:ME y es una visión de la movilidad en las megaciudades del futuro, que propone un espacioso y futurista interior.
Este Audi AI:ME está diseñado para las grandes urbes y goza de un nivel 4 de conducción autónoma, lo que significa que el vehículo no necesita ningún tipo de intervención por parte del "conductor" siempre y cuando el coche se encuentre en zonas designadas para este tipo de conducción pilotada. El nivel completamente automatizado sería el nivel 5.
El nivel 4 es en el que la figura de conductor desaparece como tal cuando se viaja por autovías o vías urbanas preparadas para este tipo de automatización, y por tanto con la infraestructura necesaria. En todo caso, el prototipo de Audi mantiene el volante y los pedales en su habitáculo, aunque convenientemente camuflados tras una cubierta de madera de nogal de poro abierto.
Además, como su nombre indica, el AI:ME recurre también a la inteligencia artificial y al aprendizaje automático (machine learning), y según el fabricante de Ingolstadt este coche del futuro será también empático y podrá interactuar tanto con el entorno como con sus ocupantes y adaptarse a las preferencias de estos.
El modelo mide 4,3 metros de largo (2,77 metros corresponden a la distancia entre ejes), 1,90 metros de ancho y 1,52 metros de alto, así que hablamos de un compacto del tamaño de un Audi A3 Sportback. La configuración interior, que Audi denomina 2+x, ofrece múltiples posibilidades en cuanto a colocación de asientos y espacio de carga, si bien solo puede acoger hasta cuatro ocupantes.
Entre las posibilidades que ofrece destacan los reposapiés bajo el salpicadero (para cuando el coche conduce por sí mismo), diversos compartimentos portaobjetos, asientos mullidos tapizados en tela, portabebidas con imanes para sujetar platos o vasos metálicos, etc... También merece mención la vegetación, ya que por primera vez hay plantas en el habitáculo de un automóvil.
Además, los sistemas multimedia y de comunicación del vehículo se controlan mediante comandos de voz, superficies táctiles o tecnología de seguimiento ocular o eye tracking. Además, el contenido de la pantalla OLED tridimensional también se puede ver a través de unas gafas de realidad virtual que permiten además ver películas, navegar por Internet, etc... Tampoco falta un equipo de audio con cancelación de ruido para hacer más silencioso el interior.
100 % eléctrico, por supuesto
El sistema de propulsión cero emisiones cuenta con un motor eléctrico está ubicado en el tren trasero y ofrece una potencia de 125 kW ó 170 CV. Más que suficiente teniendo en cuenta que Audi asegura que el coche circulará la mayoría del tiempo entre 20 y 70 km/h. La batería tiene una capacidad de 65 kWh y el modelo promete un consumo de energía muy bajo.
La carrocería del AI:ME está fabricada en aceros de alta resistencia, aluminio y compuestos plásticos, y la suspensión recurre a amortiguadores adaptativos. Las enormes llantas, por cierto, son de 23 pulgadas y según Audi aportan un toque deportivo a su aspecto exterior.
Otro aspecto importante es que la función de iluminación de las luces del coche pasa a un segundo plano, ya que toma protagonismo la comunicación con otros usuarios de la vía mediante superficies luminosas LED y proyectores integrados en la carrocería y visibles desde cualquier ángulo, capaces de mostrar símbolos fácilmente reconocibles o proyectarlos en la calzada.