Audi A3 clubsport quattro concept, así se llama una de las primeras creaciones de la marca de los cuatro aros para la edición 2014 del Wörthersee. Este prototipo está basado en el A3 Sedán pero bajo el capó delantero monta el motor TFSI de cinco cilindros de la casa, el mismo que llevan otros modelos como el Audi TT RS.
En este caso se le ha conseguido sacar 525 CV de potencia al 2.5 que también monta el RS Q3. Montar semejante motor en un coche de este peso y tamaño hace que las cifras de prestaciones asusten. Con sus 1.527 kilos de peso y el par máximo de 600 Nm disponible entre 2.300 y 6.000 RPM, el Audi A3 clubsport quattro concept acelera de 0 a 100 km/h en 3,6 segundos, mientras que la velocidad máxima es de 310 km/h.
Aunque el 2.5 de cinco cilindros rinde muy bien, para sacarle más de 500 caballos de potencia han tenido que hacerle unas cuantas modificaciones serias. Por un lado el turbo se ha cambiado por otro más grande capaz de soplar a 1,5 bar. El intercooler también es nuevo.
Si abres el capó el motor lo verás recubierto por una una carcasa de polímero reforzado con fibra de carbono (CFRP). Para transmitir tanta potencia se recurre a un cambio S tronic de siete velocidades, que evidentemente incluye la función de "launch control".
Al asfalto la potencia llega a través del sistema de tracción quattro con un embrague multidisco de accionamiento hidráulico situado en el eje trasero. En el eje delantero incorpora una suspensión McPherson con piezas de aluminio que reducen el peso de las masas no suspendidas, mientras que la suspensión trasera es de cuatro brazos.
Una estética rompedora respecto al A3 Sedán
Estéticamente los cambios respecto a un Audi A3 Sedán saltan a la vista. La carrocería es 10 milímetros más baja, gracias a unos muelles más cortos y rígidos que los del A3 normal. Las llantas son desmesuradas, ya que calza 275/25-21.
Como es lógico ahí dentro caben unos discos sobredimensionados de gran tamaño. Lleva carbocerámicos siendo los delanteros unas gigantescas paelleras autoventiladas de 370 mm de diámetro. La carrocería va pintada en Azul Magnetic y tiene varios elementos aerodinámicos específicos, desde la parrilla delantera Singleframe hasta los splitter en la parte inferior del faldón.
Otra de las novedades que incorpora este coche es el freno aerodinámico. Básicamente la tapa situada sobre el maletero se sitúa en una posición casi vertical para mejorar los tiempos y distancia de frenado. Según la marca alemana, este sistema permitiría a 250 km/h reducir la distancia de frenado alrededor de unos doce metros, ya que control de estabilidad ESC puede enviar más potencia a los frenos del eje trasero al tener mayor carga aerodinámica.
Por desgracia, por el momento únicamente será un coche de exposición, un coche con el que los amantes de la marca de los cuatro aros babearán en el próximo Wörthersee. La parte positiva es que sabemos que Audi en ocasiones es capaz de lanzar al mercado coches casi tan radicales como los que muestra en el Wörthersee. Si no que se lo pregunten al Audi RS6 Avant o al A1 quattro.