Esos ciclomotores con parte trasera “pick-up” no parecen ser lo más estable del mundo, aunque en este vídeo tres chicos italianos jugan a explorar los límites de su verticalidad.
Parece que el motor no funciona, o al menos no lo utilizan, pero supongo que estará ahí, si no la estabilidad del cacharro este sería para darle un premio. Aunque todos sabemos por Mr. Bean que los Robin vuelcan con extrema facilidad.
Niños, no intentéis hacer esto en casa.
Gracias a vidarte por el enlace.