Los simuladores de carreras intentan inspirarse en la realidad. Desde un Gran Turismo hasta Assetto Corsa, cada uno lo hace a diferentes niveles. Sin embargo, ahora es como si la realidad se inspirase en los videojuegos.
Este vídeo de un Subaru WRX STi volando sobre una pista de tierra mientras se oye la voz en off de la copiloto cantar las curvas no es una hipotética súper versión actualizada del 'Colin McRae Rally' o de 'Dirt' es real como la vida misma.
Los movimientos de cámara de los videojuegos, en los que la cámara sigue a nuestro coche, son generalmente imposibles de lograr en la vida real. Algunos campeonatos innovan a la hora de grabar las carreras, como en los campeonatos de drift donde se usan drones. Aquí, sin embargo, se consigue el efecto videojuego sin recurrir a un dron.
Subaru rally leximount
El vídeo, publicado originalmente en Facebook por la American Rally Association (ARA), nos muestra un Subaru WRX STI recorriendo una polvorienta etapa de tierra y grava en el Rally Oregon Trail como si alguien lo manejase desde una consola o un simulador.
El impresionante efecto se logra gracias a una cámara Insta360, capaz de ofrecer una visión de 360 grados, y un innovador soporte para esta cámara desarrollado de forma artesanal, el Leximount.
El palo selfie más complejo del mundo
Básicamente, la cámara estaba montada en un largo palo selfie que colgaba de la luna trasera, creando una cámara de seguimiento similar a la de un videojuego que captaba el coche desde atrás y desde arriba.
El palo selfie, a su vez, está montado sobre un soporte con cuatro ventosas para un agarre máximo. Hasta aquí, no hay nada nuevo con respecto a otros sistemas similares, usados en fotografía, por ejemplo.
La gracia del sistema está en la rótula de base, diseñada para permitir que la cámara de 360 grados gire en dirección opuesta a la del coche, captando así una imagen completa del coche en las curvas.
Su funcionamiento es puramente mecánico y se puede ajustar mediante amortiguadores y contrapesos para ajustar la estabilidad de la cámara o por si le queremos dar un efecto de rebote, por ejemplo.
A la hora de editar el vídeo se han añadido la velocidad y las revoluciones por minuto del motor, aumentando así el efecto gameplay del vídeo. Lo que no se ha añadido es el sonido del motor. Efectivamente, no suena a un boxer 4 de Subaru, tiene una tonalidad más aguda de lo normal.
Es lógico, se trata del Subaru del piloto amateur Sam Albert, construido por él mismo con la ayuda del centro de formación de rallys DirtFish, y que equipa un V8 atmosférico y de cigüeñal plano tomado prestado de un Ferrari California.
Con una potencia de 460 CV es más que suficiente para Sam Albert y al atmosférico y tener una cilindrada inferior a 4.5 litros, le permite competir en la categoría de la ARA de los “Open 4WD”, es decir, tracción integral y con casi total libertad para modificar el coche como uno quiera.