Hagamos una mezcla explosiva. Por un lado, un Chevrolet Caprice de 1985, por otro, unas enormes llantas transparentes de 30 pulgadas, y por medio, una suspensión suplementada para darle una altura libre de 50,8 centímetros.
Ahora, formulamos la pregunta. ¿Eso puede quemar rueda? Pues sí, el ‘Garfield Box’ (que así han bautizado al coche) puede. Todo un logro (...)
¿Utilidad? Ninguna, pero su dueño ya es feliz…
Vía | Autoblog en español
En MotorPasion | Llantas transparentes de policarbonato de D’Vinci Forgiato Radurra