Desde que el primer Toyota Camry saliera de la planta del fabricante japonés en Georgetown, Kentucky, se han producido ya diez millones de unidades del modelo en Estados Unidos. Precisamente la última, número diez millones, se ha rifado entre los empleados de la factoría. El afortunado ganador se llama Tom Keith, que posa feliz con su nuevo coche.
Keith, empleado de la empresa nipona desde hace 26 años, trabaja en el departamento de control de calidad de la fábrica de Kentucky y es uno de los 200 empleados que vieron salir la primera unidad de Camry de la línea de producción y siguen trabajando en la factoría. Al igual que la primera unidad, el Toyota Camry número diez millones es también de color blanco.
"Es muy adecuado que nuestro vehículo número diez millones vaya a parar a uno de nuestros empleados que ha hecho posible alcanzar dicha cifra. Nuestro equipo de trabajo es el corazón y el alma de la compañía y son ellos los que posibilitan nuestro éxito" afirma el presidente de la planta Wil James.
"Estoy en shock. Voy a darle una sorpresa a mi mujer. Ella trabaja en la biblioteca del condado y conduce un Toyota Avalon de 2007. Voy a ir para allá esta tarde, me llevaré su coche y aparcaré el Camry en su plaza. Seguro que va a gritar" comenta el propio Tom Keith, ganador de la rifa.
Vía | Carscoops