McLaren acaba de desvelar el Elva, un roadster biplaza sin parabrisas que nos hace pensar inevitablemente en un rival para el Ferrari SP2 Monza. Se trata de una nueva incorporación a su gama Ultimate Series. Esta serie limitada a 399 unidades sucede así a los McLaren P1, Senna y Speedtail.
Según la firma de Woking, el Elva es el modelo más ligero que han fabricado hasta la fecha. El McLaren Elva recupera el V8 4.0 litros biturbo de los McLaren Senna y Senna GTR. Desarrolla aquí 815 CV y entrega 800 Nm. Va asociado a un cambio automático de doble embrague y siete relaciones (la misma que en el Senna).
McLaren asegura que permite al Elva alcanzar los 100 km/h “en menos de tres segundos”. Se habla también de un 0 a 200 km/h en 6,7 segundos, siendo más rápido en ese ejercicio que el Senna. Los frenos conservan los discos carbocerámicos del Senna GTR y estrenan pinzas de freno en titanio (1 kg más ligeras que las pinzas del Senna GTR).
El nombre de Elva es un homenaje al fabricante británico Elva cuyos chasis sirvieron de base para los McLaren M1A, M1B y M1C en los años 60, los cuales son los precursores de los McLaren de calle de hoy en día. Elva, como fabricante ya no existe, y el nombre comercial es hoy propiedad de McLaren.
Controlando el flujo de aire
Al carecer de techo y menos aún de parabrisas para proteger a los ocupantes de los elementos, McLaren ha desarrollado un Sistema de Gestión Activo del Aire (Active Air Management System o AAMS). Activado automáticamente cuando coge velocidad, este sistema canaliza el aire que entra por una apertura en el frontal y lo vuelve a sacar hacia arriba justo delante del habitáculo para crear una cortina de aire que aísle los ocupantes.
Un pequeño deflector de fibra de carbono se eleva desde la parte delantera del capó cuando el AAMS está activo para dirigir el aire, que se desvía a través de varias aletas de fibra de carbono a través del capó.
Cuando no está activo, a bajas velocidades, el flujo de aire se desvía hacia dos radiadores de baja temperatura para aumentar su eficiencia. McLaren afirma que los radiadores mejoran el rendimiento al enfriar el aceite en la transmisión automática de siete velocidades.
McLaren asegura que con la tecnología AAMS no se requieren cascos. Aun así, es recomendable. Por muy potente que sea la cortina de aire generada, no puede con las virutas de goma, piedras pequeñas y demás suciedad que saltan de los neumáticos de los otros usuarios y que irán a parar en las manos y cara del conductor y su pasajero. Quizá por eso, McLaren propone un parabrisas opcional.
El McLaren Elva tiene una serie de características diseñadas para maximizar la eficiencia aerodinámica, incluidas las entradas de aire en los laterales traseros y un alerón trasero activo. Este último funciona junto con un difusor trasero de diseño bastante extremo y diseñado para acelerar el aire que sale del fondo plano del Elva creando así apoyo aerodinámico.
1,7 millones de euros, pero con opciones gratis
Para acceder a bordo del McLaren Elva hay dos opciones: abrir las puertas hacia arriba o bien saltar por encima de ellas. De hecho, McLaren lo ha previsto así dotando al Elva de asientos más cortos para poder un pie en el habitáculo por encima de la puerta y dejarse caer en el baquet.
El volante y el cuadro de instrumentos son solidarios para el que el piloto pueda encontrar la posición de conducción ideal. El cockpit ha sido claramente diseñado pensando exclusivamente en el piloto.
El mando de selección de los modos de conducción (Confort, Sport o Track) están cerca de las levas de cambio. Una pantalla táctil de 8 pulgadas, que lo mismo enseña la telemetría en una tanda en circuito que el mapa del navegador completa la presentación interior. Sirve también de retrovisor y para los mandos del climatizador.
¿El precio? Si has de preguntar... Hablamos de 1,7 millones de euros con un equipamiento reducido, pues apenas cuenta con elementos de confort (lógico, por otra parte). Eso sí, las pocas opciones que hay serán gratis. Así, parabrisas y sistema lift para levantar el morro del coche de cara a subir una rampa o salvar un resalto, así como los arneses de seis puntos son gratis.
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