Cada año, por estas fechas, revive ese consejo básico de seguridad: cuidado con dejarnos a los niños dentro de un coche aparcado al sol. Bien, pues este problema tiene una solución la mar de ingeniosa por su simplicidad que responde al nombre de EZ Baby Saver. Su inventor se llama Andrew Pelham y contaba 11 años hace unos meses, cuando ideó este sistema.
Según explica él mismo, Andrew es una mente inquieta, de manera que se inscribió en un certamen para jóvenes inventores con la idea de dar solución al problema de los niños asfixiados en los coches por descuido de sus padres. Dicho y hecho, el chaval se puso a investigar, y descubrió que un niño pequeño puede morir en menos de 15 minutos en una situación de ese tipo. De hecho, descubrió también que en Estados Unidos fallecen de esta manera 38 niños cada año.
El concurso en el que participó, el Rubber Band Contest for Young Inventors, es un evento que patrocina el Instituto de Polímeros de la Universidad de Akron, que es la capital de la goma de Estados Unidos. Por eso, una de las bases del concurso establece que la goma debe ser una parte fundamental de los inventos que se presenten.
Siguiendo esto, Andrew basó el EZ Baby Saver en el uso de gomas elásticas y un poco de cinta adhesiva. Fácil y barato, al alcance de cualquiera. Tomando como premisa que los adultos que se dejan a un niño olvidado en el coche lo hacen por puro despiste, sobre todo por un cambio en sus rutinas habituales, Andrew Pelham diseñó un sistema que lo único que hace es alertar al conductor cuando está a punto de abandonar el vehículo y dejarse a su niño dentro.
El mecanismo es tan sencillo como aprovechar el momento de colocar al niño en su sistema de retención infantil para colocar también el EZ Baby Saver de manera que no obstaculice al conductor, pero sí que se tense al intentar abrir la puerta.
De esta forma, cuando el conductor está punto de abandonar el vehículo se encuentra una banda de goma de colores chillones que le hace pensar que hay alguien más que viaja a bordo. Andrew descarta la idea de que al adulto se le olvide colocar la goma tras colocar al niño en su sistema de retención infantil: su convicción es que nadie en su sano juicio dejaría un niño encerrado en un coche al sol, y que por tanto esa acción de protección está garantizada.
Vía | The Blaze
Más información | EZ Baby Saver