Una de las dudas más comunes a la hora de comprar un coche de segunda mano es saber si estamos ante un coche que es lo que realmente nos están prometiendo. Para este uso y para otros más podemos hacer uso de los datos de la DGT a través de varios buscadores donde con introducir el número de placa nos ofrecerán la fecha de matriculación.
De esta manera rápida y sencilla basta con tener un smartphone para saber cuándo el coche fue matriculado por primera vez.
Una consulta rápida para saber la fecha de matriculación sólo con la matrícula
Para averiguar la fecha de matriculación de cualquier vehículo bastará con introducir en cualquiera de los buscadores online con acceso a la base de datos de la DGT como este, o este otro, o este otro más. Así, de manera rápida y sencilla podremos salir de dudas por si sospechamos que un vehículo puede tener más años de la cuenta.
Hay que tener en cuenta algo básico como es que la fecha de una matriculación puede no coincidir con una primera matriculación. Es decir, que un vehículo de 2006 puede haberse rematriculado en 2012, pero la fecha de matriculación seguiría siendo la original aunque buscásemos por la matrícula más reciente. Es un valor que no cambia.
Por si queremos ir un paso más allá, a través de este enlace también podemos solicitar un informe directamente a la DGT con el número de matrícula. Puede ser reducido o detallado y nos puede aportar los datos del titular, los datos técnicos del vehículo, cuántos titulares ha tenido anteriormente, la situación administrativa del vehículo, la caducidad de la ITV y, muy importante, si hay cargas o gravámenes que impidan su transmisión.
Desde que en el año 1900 comenzaron a matricularse los primeros vehículos en España, los coches y el resto de automóviles se han identificado en base a tres tipos de matrículas distintas. La primera marcaba cada vehículo con la inicial de la provincia a la que pertenecía seguida de un dígito (A-1111, de 1900 a 1971), posteriormente se añadieron dos letras al final (A-1111-AA, de 1971 a 2000) y la más reciente es la que tenemos actualmente, con cuatro dígitos y tres letras (1111-AAA, desde 2000), vigente desde el año 2000.
También hay que destacar que como curiosidad hay letras que no se utilizan para evitar posibles falsificaciones o equivocaciones en la lectura. Así, las letras Ñ y Q no se emplean para suprimir las posibles confusiones con la N y la O. Además las vocales tampoco se utilizan.