Menudo premio que se ha llevado Maverick Viñales por ganar su primer Gran Premio de MotoGP con la Suzuki GSX-RR. La marca japonesa le había preparado un juguete muy especial a Maverick para que siguiese divirtiéndose en Silverstone, todo un Radical SR3 con los colores de su moto para que no olvidase las sensaciones vividas el pasado domingo.
El Radical SR3 era un poco diferente al que probamos en Motorpasión hace unos años (parte 1 y parte 2), ya que escondía un motor de Suzuki GSX1300R Hayabusa llevado hasta los 1.500 centímetros cúbicos capaz de desarrollar 260 caballos. La relación entre Radical y Suzuki viene de largo, ya que la compañía japonesa lleva más de 15 años suministrando motores para los Radical SR1, SR3 y SR8.
Como es lógico, las diferencias a nivel de sensaciones entre la moto que pilota habitualmente el piloto español y el coche, son enormes, pero aun así Maverick demostró desde el primer momento una capacidad de adaptación y para rodar rápido que sorprendió mucho a todos los presentes, incluídos los miembros de Radical que estaban prestando apoyo en el evento.
En palabras de Viñales "Para mi lo más impresionante ha sido la velocidad de paso por curva, así como el agarre y la fuerza aerodinámica. Es realmente impresionante lo rápido que puedes ir en las curvas, algo a lo que no estoy acostumbrado porque en la moto vas más lento. He disfrutado mucho conduciéndolo. En MotoGP estoy acostumbrado a las aceleraciones rápidas, pero incluso con el mayor peso del coche, podía sentir la aceleración del motor de la Hayabusa. En todas las marchas podía sentirlo empujando".
Sin duda se trata de un premio más que merecido para el piloto español, que ha conseguido con esta victoria llevar a la marca de Hamamatsu a lo más alto del podio de MotoGP tras muchos años sin lograrlo, y al mismo tiempo inscribir su nombre en el olimpo de los pilotos españoles capaces de ganar una carrera en la máxima categoría del motociclismo mundial. Y las que quedan.
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