Una vez más, el récord del circuito de Nürburgring cambia de manos. Esta vez el de coches de producción y el modelo que lo ha conseguido es el Mercedes-AMG One, la bestia híbrida de la marca de la estrella.
El hypercar alemán ha sido el más rápido en el trazado de Nordschleife y de acuerdo al nuevo sistema de medición, con un tiempo de 6:35.183 minutos, mientras que con el método anterior hubiera detenido el cronómetro en 6:30.705 mintuos.
La última tecnología para superar en 5 segundos al Porsche 911
El circuito de Nürburgring es la prueba de fuego que deben superar todos los coches deportivos que llegan al mercado. El tiempo que tarden en completar una vuelta al trazado de Nordschleife es lo que determina lo rápido o lentos que son, como si fuese un dato más de su ficha técnica: velocidad máxima, 0 a 100 km/h y tiempo por vuelta en el Infierno Verde.
El récord absoluto del trazado alemán está en manos del Porsche 919 Hybrid EVO, un prototipo que ni siquiera se puede utilizar en competición porque no respeta ninguna normativa de homologación. Solo necesitó 5:19.546 minutos para completar una vuelta a los 20,8 km de la pista germana.
Pero hay otro récord “mas mundano”: el de los coches de producción. Hasta ahora, pertenecía al Porsche 911 GT2 RS MR, la variante más bestia que ha existido del Porsche 911 de calle (con permiso del 911 GT1 directamente salido de Le Mans). Sin embargo, el nueveonce ha sido destronado y el nuevo rey de Nürburgring es el Mercedes-AMG One.
El hypercar híbrido de la estrella tardó 6:35,183 minutos en recorrer el Infierno Verde el pasado 28 de octubre a las 17:14 de la tarde. El encargado de completar la vuelta récord fue Maro Engel, un piloto alemán que sabe muy bien lo que es ir a fondo en el circuito alemán, puesto que ganó las 24 Horas de Nürburgring en 2016 con la ayuda de otro ilustre de Mercedes: Bernd Schneider.
Para lograr el récord, Engel tuvo que emplearse a fondo y aprovechar al máximo el aporte eléctrico del sistema de propulsión híbrido del Mercedes-AMG One, derivado del Fórmula 1 del fabricante alemán.
Y es que la electrificación ha cambiado la forma de conducir un hypercar y ya no basta con saber conducir, también hay que tener en cuenta la recuperación de energía y la forma de utilizar esa ayuda extra, sin olvidarse de otras soluciones del AMG One, como el DRS, que es clave en las rectas y en las frenadas.
Gracias a ello, Engel alcanzó una velocidad máxima de 338 km/h en la vuelta rápida, una cifra muy cercana a los 352 km/h que puede alcanzar como máximo este Mercedes-AMG. Y eso que las condiciones de la pista no eran óptimas porque el sol estaba a punto de ponerse y el asfalto estaba más frío de lo normal, además de tener algunas zonas húmedas. Lo normal a estas alturas del año en Alemania.
Para que el récord sea válido, la unidad utiliza debe respetar las especificaciones de producción, incluidos los neumáticos, que fueron unos Michelin Pilot Sport Cup 2 R MO idénticos a los que lleva de serie este modelo. Estas gomas están específicamente desarrolladas para el Mercedes-AMG One y trabajan de forma conjunta con los frenos carbocerámicos que también lleva de serie el hiperdeportivo.
En cuanto a la mecánica, conviene recordar que utiliza un conjunto híbrido enchufable formado por un motor de gasolina V6 biturbo de 1.6 litros y tres motores eléctricos, dos de ellos colocados delante y otro detrás.
En conjunto, producen un total de 1.063 CV, mientras que la batería de 8,4 kWh permite recorrer 18 km en modo eléctrico, aunque en pista resulta más útil acumulando la energía de las frenadas para entregarla cuando el conductor demanda toda la potencia en el modo de conducción Race Plus.
Aun así, llama la atención que semejante despliegue tecnológico derivado de la Fórmula 1 solo se haya materializado en 8 segundos menos por vuelta que el Porsche 911 GT2 RS de la generación anterior, con 700 CV y ningún tipo de materialización. Si se compara con su variante MR, el Mercedes-AMG solo es 5 segundos más rápido.
Eso sí, el Porsche no tiene la etiqueta ECO del Mercedes, pero no creas que por ser híbrido es menos bestia. Solo hay que ver –y escuchar– el vídeo onboard que se grabó durante la vuelta récord a Nürburgring.