El Kia Optima GT con su motor de 245 CV llegará a las exposiciones con carrocería berlina y Sportswagon antes de final de año. Una versión que viene a completar la oferta de un modelo que, por el momento, cuenta con dos carrocerías, motor diésel y un híbrido.
Diseño exterior e interior más deportivo para esta berlina que también se comercializará con siete años de garantía o 150.000 kilómetros. Vamos a ver qué cambia en las versiones GT.
Nuevos paragolpes delanteros y traseros, parrilla que mantiene el diseño característico Tiger Nose pero con acabado en cromo satinado, llantas de aleación de 18 pulgadas que dejan entrever unas pinzas de freno en color rojo y unos discos ventilados de mayores dimensiones que en el resto de versiones.
El acabado en cromo satinado también está presente en los tiradores de puertas ylas molduras laterales, a lo que se suma un acabado en negro brillante para las taloneras. En la zaga el Optima GT luce un difusor en la parte baja del paragolpes y una salida de escape doble.
Un interior acorde a su carácter
No esperes un volante desplazado en piel vuelta o asientos tipo baquet, no es el estilo de este coche. El Optima GT apuesta por la comodidad y sensación de calidad con un toque de deportividad. Los asientos delanteros son de corte deportivo, con 'orejas' más prominentes en el respaldo y la banqueta para mejorar la sujeción lateral. Como buena versión más sport lleva el logo GT grabado en la tapicería.
El tapizado del techo es de ante negro, la consola central está acabada en aluminio, pedales de aluminio, volante de cuero negro achatado en la parte inferior con costuras en rojo y una instrumentación específica con indicador de presión del turbo y par motor instantáneo.
Así es el motor
Bajo el capó este Optima esconde un cuatro cilindros de gasolina de dos litros de cilindrada y, por supuesto, es turboalimentado. Desarrolla 245 CV de potencia máxima a 6.000 rpm y un par máximo de 353 Nm entre 1.350 y 4.000 rpm. Cuenta con distribución variable CVVT, inyectores con orificios perforados por láser, bomba de combustible de alta presión, caja de cambios automática de seis velocidades y una serie de elementos o sistemas pensados para mejorar las prestaciones y optimizar el rendimiento.
El Optima GT acelera de 0 a 100 en sólo 7,4 segundos (7,6 en el caso del familiar), alcanza los 240 km/h de velocidad máxima (232 el Sportswagon) y homologa en ciclo NEDC un consumo medio de 8,2 litros a los cien kilómetros.
Las suspensiones se han modificado para mejorar el comportamiento y cuenta de serie con control electrónico. Para su desarrollo y puesta a punto se han recorrido más de 10.000 kilómetros en el exigente Nürburgring (hay que empezar a pensarse eso de irse a vivir junto al circuito para hacerse piloto probador ¿no?).
Los frenos también se han mejorado con discos ventilados en las cuatro ruedas 30 milímetros más grandes que los del diésel, miden concretamente 330 mm y 314 mm delante y detrás respectivamente.
En cuanto a equipamiento de confort, conectividad y seguridad preventiva el Optima GT está a la última, como era de esperar.
Kia está rompiendo en ventas en España pero el Optima era un coche que se les ha resistido, veremos qué sucede con esta última generación y con esta versión GT.