La empresa NEVS (National Electric Vehicle Sweden) ha decidido suspender la producción limitada del Saab 9-3 eléctrico por falta de dinero contante y sonante. Durante cuatro semanas se realizará una "parada controlada" de la planta de Trollhattan.
La ciudad china de Quingdao posee el 22% de NEVS a través de su agencia de inversión Qingbo Investment Co. Aún no han hecho frente a sus compromisos de financiación. Se han pedido 200 coches, ya que aquel país está apostando por los eléctricos ante su galopante problema de contaminación atmosférica.
NEVS sigue buscando apoyos, tanteando a otros fabricantes para desarrollar una nueva plataforma en régimen de cooperación, o para que inviertan en la empresa. Ya habrá que esperar a junio para saber más. Se estaban fabricando seis coches al día.
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