En línea con los últimos días hoy el precio de la gasolina y el diésel vuelven a variar ligeramente. Mientras que la gasolina vuelve a subir tímidamente, el diésel permanece contenido. La brecha entre ambos combustibles ronda los dos céntimos el litro de media a favor del diésel, cuando a mediados del año pasado el gasóleo A llegó a estar hasta 12 céntimos el litro más caro.
Así, hoy la gasolina sin plomo de 95 ya cuesta de media 1,645 euros el litro, mientras que el diésel se queda en un precio medio de 1,620 euros el litro. Por su parte, la gasolina sin plomo de 98 sigue a 1,815 euros el litro de media, mientras que el gasóleo A+ marca 1,719 euros el litro. El GLP baja tímidamente a 1,004 euros el litro y el GNC también desciende hasta los 1,509 euros el litro de media.
HOY | AYER | MÁXIMO | |
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GASOLINA 95 | 1,645 | 1,644 | 2,152 |
GASOLINA 98 | 1,815 | 1,815 | 2,311 |
GASÓLEO A | 1,62 | 1,621 | 2,106 |
GASÓLEO A+ | 1,719 | 1,72 | 2,199 |
GLP | 1,004 | 1,005 | 1,058 |
GNC | 1,509 | 1,514 | 3,339 |
Conviene recordar que los precios medios que se muestran en la tabla corresponden a la Península y Baleares y no tienen aplicados los nuevos descuentos que ofrecen a sus clientes algunas gasolineras como Repsol, GALP, Cepsa, Shell o Disa, ya que el descuento directo de los 20 céntimos del Gobierno desde principio de año se aplica únicamente a transportistas y no de forma directa.
Los factores que influyen en el precio de la gasolina y explican sus variaciones son muchos y muy diferentes, y más en un contexto de incertidumbre como el que nos encontramos. Pero si bien el precio del barril Brent no es el único indicador que condiciona el precio del carburante, es una referencia clave, y hoy cotiza en torno a los 86 dólares cuando el pasado 4 de enero costaba 77,6 dólares.
Materia prima aparte, la oferta y la demanda también influyen directamente en el precio final de los carburantes. Así, hemos de tener en cuenta que, a consecuencia de las últimas sanciones a Rusia, los precios podrían iniciar pronto una senda alcista.
También dependerá de cómo se comporten la oferta y la demanda mundial: todo influye en el precio final que pagamos los consumidores en el surtidor, aunque no siempre de forma inmediata, por los conocidos efectos "pluma y cohete". De momento, para aquellos que no tienen otro remedio que coger el coche, recomendamos buscar la gasolinera más barata que tengamos cerca o en nuestra ruta.