Ayer me escapé de la capital un día antes de la gran operación salida de este año, que dará comienzo en unas horas y que pondrá a millones de españoles en la carretera. A pesar de ser un privilegiado por irme un día antes que la mayoría, también tuve que aguantar un tráfico más denso que en un día normal.
En medio de ese tráfico denso y con 35 grados golpeando contra mi coche, me llamaron poderosamente la atención el número de coches averiados que me encontré en la carretera. Llegue a ver tramos de 500 metros con 3 e incluso 4 coches parados en los arcenes, sobre todo en las zonas de subida que es dónde los vehículos que no están a punto tienen más posibilidades de fallar.
Y es que CONEPA, la Federación Epsañola de Empresarios Profesionales de Automoción acaba de anunciar que entre enero y julio los servicios a talleres han bajado cerca de un 20%, aumentando hasta un 25% en el caso de las tradicionales revisiones previas a las salidas vacacionales.
Esto está haciendo que muchos conductores salgan de vacaciones con el coche en mal estado, sin revisar y que sea más probable que sufran una avería en carretera, con las consecuencias que ello conlleva. Por un lado está el incordio de tener que pararte en medio de la “estepa” con 40 grados de calor y tener que llamar a la grúa para que te venga a buscar.
Por otro lado está en consiguiente riesgo que estas paradas suponen, ya que las carreteras españolas carecen de arcenes en muchas ocasiones. Si a esto sumamos que según GIPA el parque móvil ha envejecido por primera vez en muchos años hasta los 7,9 años de media, creo que no hace falta decir que una pasada por el taller antes de comenzar las vacaciones, no le vendría mal a muchos.
Via | CONEPA