Ya puedes salvar a tu viejo coche de gasolina con combustible sintético, pero llenar el depósito te saldrá más caro que el coche

Son muchos los que defienden que el coche eléctrico no puede ser la única solución para desplazarse en el futuro. El hidrógeno es una alternativa, pero también los combustibles sintéticos.

Una empresa británica ya vende gasolina sintética de 95 octanos neutra en carbono, pero es tan cara que llenar con ella un depósito de 50 litros cuesta más de 100.000 euros.

Su precio se reducirá en los próximos años

Nos lo hemos aprendido como si fuese un mantra: Europa se ha marcado el objetivo de lograr la neutralidad de carbono para el año 2050. Al principio parecía una meta lejana, pero ya llevamos un tiempo notando las consecuencias de esta política en forma de restricciones a la circulación de los coches de combustión, encarecimiento del precio de los coches nuevos y combustibles más caros.

Por otro lado, en principio, Europa prohibirá la venta de coches gasolina y diésel en 2035 una fecha mucho más cercana que el año 2050. Hoy por hoy, todo apunta a que la alternativa a este tipo de automóviles será la movilidad eléctrica, pero esta tecnología tiene tantos flecos por pulir que no se dejan de buscar otras opciones.

El hidrógeno es una de ellas, tanto en coches eléctricos de pila de combustible como para alimentar motores de combustión de hidrógeno. Pero no es la única alternativa porque también se trabaja desde hace tiempo en los combustibles sintéticos.

De hecho, la idea de utilizar estos carburantes se baraja desde hace décadas, pero no ha existido la necesidad de producirlos en masa. Sin embargo, las cosas han cambiado y los combustibles fósiles se han convertido en el enemigo número uno de las políticas que persiguen la neutralidad de emisiones.

Por lo tanto, es cuestión de tiempo que el petróleo quede fuera de juego, al menos en ciertos lugares del planeta, como nuestro continente. Pero esa incertidumbre que rodea al coche eléctrico ha provocado que se multiplique el interés en otras alternativas. Por eso se está hablando más que nunca del hidrógeno y de los carburantes sintéticos, pese a que el futuro de ambas cosas también es bastante incierto.

Pero eso no impide que grandes fabricantes, como Porsche, insistan en los llamados eFuels. Los de Stuttgart acaban de inaugurar una planta experimental de fabricación de carburante sintético en Chile y su objetivo es producir unos 130.000 litros al año en una primera fase piloto. Para finales de esta década, la idea es producir 550 millones de litros anuales.

Hoy por hoy, quedan muchos desafíos técnicos que superar para estandarizar el uso de los combustibles sintéticos, pero no se puede descartar como alternativa, sobre todo si se crea un marco legal que permita su uso en los coches de combustión más allá de 2035 y, por supuesto, si se abarata.

El problema es que, para que esto último suceda, es necesario reducir los costes de producción porque actualmente un litro de combustible sintético es carísimo, hasta el punto de que plantearse su uso es absurdo.

De momento, el único combustible sintético neutro en carbono que se puede comprar es el de Zero Petroleum, una compañía dirigida por el ingeniero de Fórmula 1 Paddy Lowe. Según Zero, este combustible es un remplazo directo de la gasolina y su ciclo de producción se lleva a cabo con energía renovable, por lo que fabricarlo deja un balance neutro en carbono.

El problema es su precio: la garrafa de 20 litros cuesta 50.000 libras, el equivalente al cambio actual a 56.776 euros, por lo que cada litro de este eFuel de gasolina sintética de 95 octanos cuesta 2.839 euros.

Es un precio que da miedo, pero, de alguna manera, Zero Petroleum lo justifica porque es una edición especial limitada de la que solo se venderán ocho garrafas, todas ellas firmadas por Paddy Lowe. Es decir, algo anecdótico. Tampoco hay que olvidar que es el primer combustible sintético neutro en carbono que se pone a la venta.

Esta empresa también vende a través de su página web el mismo combustible, pero a un precio menos caro, porque desde luego sigue sin ser barato. Esta garrafa de 20 litros de Zero Syn95 cuesta 1.000 libras, el equivalente al cambio actual a 1.135 euros, por lo que el litro tiene un precio de 56,75 euros.

Los clientes que compren ahora está última tendrán que esperar hasta 2025 para recibir su garrafa, mientras que los que paguen 56.776 euros por una de las otras ocho garrafas de idéntica capacidad y con el mismo combustible la tendrán a finales de este año.

Esto quiere decir que en un plazo de dos años se reducirá el precio de 2.839 euros por litro a 56,75 euros. Más adelante, Zero Petroleum comercializará Zero Syn98, equivalente a gasolina de 98 octanos, además Zero SynDiesel, es decir, diésel sintético. También pondrá a la venta combustible sintético para aviones.

Para finales de esta década, el objetivo de Zero es que la producción a gran escala de este carburante reduzca el litro de combustible sintético a 3 euros. Pero todavía quedan muchos años para ver esas tarifas y, para entonces, puede que hasta los combustibles fósiles se muevan en esas cifras.

Lo que está claro es que el combustible sintético tiene futuro porque otra de las normativas que vienen de Europa obligará en 2035 a que al menos el 20% de los componentes del combustible de aviación, el Jet A-1, sean de origen sostenible con un mínimo de 5% de eFuel.

Habrá que ver si también tienen futuro en el mundo del automóvil, ya sea para alimentar los motores de combustión de los coches nuevos o para seguir utilizando los automóviles clásicos con un combustible neutro en carbono que no obligue a llevar a cabo ningún tipo de modificación en la mecánica para utilizarlo.

También te puede gustar

Portada de Motorpasión

Ver todos los comentarios en https://www.motorpasion.com

VER 21 Comentarios