Según el reglamento de congelación progresiva del desarrollo de los motores de Fórmula 1, en 2016 el número de tokens disponible para cada fabricante se veía reducido de los 32 de este año a los 25. Sin embargo, en la trascendental reunión que mantuvieron ayer en Ginebra fabricantes de motores y FIA, se decidió permitir el desarrollo de los motores de Fórmula 1 durante 2016 al mismo nivel que este año.
De este modo, además de tener disponible nuevamente otros 32 tokens para el desarrollo de 2016, se ha desbloqueado la posibilidad de desarrollar algunas partes específicas de la unidad de potencia que por reglamento no podrían haberse tocado para la próxima temporada (cárter, accionamiento de válvulas, cigüeñal...). En definitiva, visto el panorama actual, en el que el 50% de los motores están sufriendo a nivel de prestaciones (Renault y Honda), por fin se ha impuesto la lógica en una decisión de la FIA.
No menos importante es el hecho de no tener la presión extrema de tener el motor para 2016 listo el 28 de febrero. No será necesario hacer un esfuerzo mastodóntico, especialmente en los casos de Renault y Honda, para intentar mejorar en apenas tres meses, sino que durante todo el año se podrán ir introduciendo mejoras progresivas que permita a estos motores nivelarse con los de Mercedes y Ferrari.
Se podrán suministrar motores de especificación "B"
Además, la imposición de no poder usar motores del año anterior, medida que complicaba las negociaciones de los motoristas con equipos como Red Bull o Toro Rosso, también ha sido eliminada, por lo que los fabricantes de motores que se presten a ello podrán entregar unidades de motor con una especificación inferior a sus clientes. De este modo, la posibilidad de que Toro Rosso monte motores Ferrari de 2015 el siguiente año crece enteros.
Todas estas decisiones están pendientes de ser aprobadas en el próximo World Motor Sport Council que se celebrará a principios de diciembre, pero sin lugar a dudas, se trata de un paso adelante para mejorar el espectáculo de la Fórmula 1, y eso siempre es motivo de aplauso.