¡Paren las rotativas! Sí, supongo que ya habrás oído eso de que la FIA ha entonado el mea culpa respecto al enésimo error de redacción del reglamento técnico de la Fórmula 1, y que los tres motoristas de 2014 (Ferrari, Renault y Mercedes) van a poder desarrollar sus congelados motores durante la temporada 2015. Pero eso es sólo una verdad a medias.
Para empezar, hay que dejar clara una cosa: el desarrollo de los motores no se ha descongelado. En absoluto. La normativa en relación a las piezas que pueden desarrollar los motoristas de una temporada a otra sigue siendo exactamente la misma con la que se inició el año pasado la nueva era de los V6 turbo. En concreto, para esta temporada 2015 los motoristas podrán introducir mejoras en aproximadamente un 48% de la unidad propulsora. Y entonces, ¿cuál es el cambio y por qué hay quien incluso usa erróneamente el concepto descongelación?
El cambio que ha sido ocasionado por esta nueva laguna reglamentaria introduce simplemente un factor tiempo que tampoco se ha acabado de evaluar adecuadamente en muchos frentes. El error —clamoroso por otra parte— de la FIA, consiste en no haber fijado una fecha límite para homologar las unidades motrices para esta temporada 2015, cosa que abre la posibilidad de introducir las mismas en cualquier momento del año, y no necesariamente antes de la primera cita en Australia.
Muchos análisis han apuntado a esta circunstancia como una clara ventaja para Renault y Ferrari. Pero que nadie olvide una cosa: mientras no se homologue la nueva unidad motriz para 2015, los monoplazas deberán competir con los motores de 2014. Y si no ando muy equivocado, en ese escenario la ventaja de la motorización Mercedes es más que evidente. Por lo tanto, todo lo que tarden Ferrari y Renault en homologar su nuevo motor de 2015, va a ser tiempo de ventaja para que Mercedes pueda seguir imponiendo su ley y abriendo brecha en el campeonato.
Por otro lado, no hay que olvidar que también Mercedes va a tener un tiempo adicional para desarrollar su ya de base mejor motor. Son muchas las informaciones que apuntan que los alemanes podrían tener en la recámara unos 50 CV adicionales que obtendrían de optimizar su sistema de recuperación de energía, que no era ni mucho menos el mejor de 2014. Por mucho que Ferrari y Renault mejoren, que sin duda lo harán, no habrá que perder de vista que también Mercedes tiene un margen de mejora manifiesto.
Para terminar, a la hora de la verdad, ningún motorista va a alargar la homologación de su motor 2015 mucho más allá del Gran Premio de España (primero en Europa, y quinto del año). ¿Por qué? Pues tan sencillo como que deben introducir sus mejoras cualitativas en lo que a motorización se refiere lo antes posible. No pueden tirar carreras con el motor viejo, no sólo por la desventaja en prestaciones, sino porque además cada piloto puede usar únicamente 4 unidades motrices en toda la temporada sin recibir penalización, y no creo que ninguno quiera verse obligado a entrar en un segundo ciclo de motores con otra unidad de 2014.
En definitiva: los motoristas han ganado unas semanas de tiempo para acabar los deberes, pero la esencia del reglamento sigue intacta. Bien, todos los motoristas, menos el recién llegado Honda, que tendrá que homologar sí o sí su unidad motriz antes del 28 de febrero de 2015. Probablemente el equipo que más hubiera necesitado esas semanas extras de desarrollo. Pero, vamos a dejar el debate de Honda para otro momento.