Aunque no siempre se ha podido ligar “Ford” y “eficiencia” en la misma frase, lo cierto es que se están poniendo las pilas a base de bien. A lo largo de este año van a comercializar 15 modelos que pasarán a ser los más eficientes de sus respectivos segmentos (a igualdad de potencia y tipo de combustible).
Una de las cartas de Ford para este propósito es el 1.0 EcoBoost (100 ó 125 CV) para los Focus, B-MAX, C-MAX (solo 125 CV) y Gran C-MAX. Este motor está demostrando ser capaz de conseguir consumos bastante competitivos con los motores diesel TDCi, que tampoco se duermen en los laureles.
En versiones de gasóleo, el estandarte es el Focus ECOnetic, con un consumo simbólico de 3,4 l/100 km. En otro segmento menor está el B-MAX 1.6 TDCi (95 CV), que se coloca líder de su segmento con 4 l/100 km. Eso es mucho mejor que el Fusion al que sustituye (ver prueba).
Hablando de consumidores mayores, presumente de liderar la categoría de compactos de alto rendimiento con el nuevo Ford Focus ST (250 CV) en eficiencia. Por último, las furgonetas Transit y Transit Tourneo Custom con motor 2.2 TDCi precisarán menos que la competencia a la hora de repostar.
No nos olvidamos tampoco del pick-up Ford Ranger 2.2 TDCi (125 CV), el más austero de su categoría con propulsión trasera (2WD). Sin duda es una apuesta por mejorar la eficiencia suya y retar a la competencia a seguir mejorando. Veremos por cuánto tiempo estos 15 modelos se mantienen líderes (siempre hablando de homologación, no consumo real).
Por último, sabemos que en otoño el Ford Fiesta recibirá nuevos motores, tres gasolina y tres diesel, probablemente acompañados de una pequeña actualización estética, pues el Fiesta se vende sin apenas cambios desde 2008. Desde luego la eficiencia es una asignatura pendiente para él, especialmente los gasolina.