Quizá no sea el modelo más moderno, el más rápido ni el más caro de Maranello, pero definitivamente es carne de Dolorpasión™. El Ferrari F430 Spider de color rojo brillante que hoy es nuestro protagonista pertenece a un ciudadano croata, que perdió el control mientras conducía por Austria y acabó en un estanque de unos dos metros de profundidad.
Al parecer, el hombre de 36 años se salió de la carretera y cayó por un terraplén de unos setenta metros de altura, para acabar, literalmente, metido en un estanque con su llamativo descapotable. Afortunadamente consiguió salir del vehículo sin apenas rasguños y encontró una casa cercana desde la que llamó a los servicios de emergencia.
Una vez los bomberos llegaron al lugar, procedieron a sacar el Cavallino submarinista del fondo del estanque. Aparentemente el vehículo no muestra muchos daños exteriores, aunque al haber estado sumergido tanto tiempo es probable que no vuelva a arrancar nunca. Ya sabéis que Dolorpasión™ ocurre en domingo. Podéis encontrar más imágenes del siniestro siguiendo el enlace a la fuente.
Vía | GT Spirit