Hace ya tiempo que los inversores detrás de TVR, con Les Edgar al frente, anunciaron que la marca volvería a fabricar coches. Parece que fue hace décadas de eso. También es verdad que Les Edgar tenía pensado presentar el coche en el Festival of Speed de Goodwood de este año. Y no fue el caso.
Las razones del retraso en el desarrollo del coche se deben a un ligero cambio de orientación del proyecto. Un cambio ligero, pero que obliga a rediseñar una completa serie de elementos. Pero no son las únicas razones que han propiciado el retraso del nuevo TVR.
Inicialmente, el coche debía tener un chasis en materiales compuestos, pero tras la presentación del V8 Cosworth que lo animará, se decidió que la estructura sería de fibra de carbono. Al parecer sería la genial estructura iStream Carbon desarrollada por Gordon Murray.
Además, la construcción de la nueva factoría TVR en Ebbw Vale, en Gales, se ha revelado una operación complicada a nivel burocrático, pues también tienen que hablar con el gobierno galés, ya que TVR se beneficiará de incentivos por parte del País de Gales.
De momento, el segundo prototipo del TVR, bautizado Black Hound, ya circula. Y, al menos en esta versión prototipo, suena como tendría que sonar un deportivo. De hecho, debería ser la definición misma de un sonido deportivo.
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