Electrificación. Esta es desde hace años la máxima de las autoridades municipales de Londres, que buscan alternativas más limpias a sus míticos autobuses rojos de dos plantas.
Así, una flota de 68 autobuses eléctricos patrullarán las calles londinenses el próximo verano. Con tres paquetes de baterías de 200 Kw y 230 km de autonomía, uno de estos pequeños gigantes podrá recorrer una ruta de 19 km 10 veces.
Para 2037 todos los autobuses de Londres serán eléctricos
De esos 68 autobuses eléctricos, 31 de ellos serán Optare Metrodecker, y cubrirán algunas de las rutas más icónicas de la capital, como la 34, que va desde Friern Barnet hasta el Puente de Londres.
Los otros 37 autobuses han sido pedidos por BYD / British Alexander Dennis Limited: serán modelos Enviro400EV 100 % eléctricos que funcionan con baterías de fosfato de hierro que permiten el transporte durante todo el día con una sola carga, según la compañía (lo puedes ver en la imagen inferior).
Los planes de electrificación fueron anunciados por el alcalde de Londres, Sadiq Khan, hace unas semanas. Suponen la mayor flota de autobuses eléctricos de dos pisos que hay en Europa hoy en día, pero no supondrán, de momento, la desaparición de sus antecesores.
Los 68 nuevos autobuses eléctricos de dos pisos se unirán a la flota de autobuses en Londres, aunque Sadiq ha revelado que este número aumentará más de 10 veces, y que dos rutas operadas por Metroline desde Barnet hasta el centro de Londres serán operadas exclusivamente por autobuses eléctricos de dos pisos.
Para 2019 Transport for London (TfL) pretende tener 240 autobuses eléctricos funcionando en la red. En última instancia, para 2037 todos los autobuses de Londres tendrán cero emisiones.
TfL probó con éxito cinco autobuses eléctricos de dos pisos en la ruta 98 de Willesden a Holborn en 2016. Desde el consistorio aseguran que, además de eliminar el óxido nitroso tóxico, los nuevos autobuses 100 % eléctricos proporcionarán a los pasajeros nuevas funcionalidades, como puertos de carga USB.
Se estima que la mala calidad del aire contribuye a más de 40.000 muertes prematuras en todo el país cada año. Muchas ciudades, incluida Londres, también piden al Gobierno que adopte 2030 como la fecha en que se eliminen gradualmente las ventas de nuevos automóviles y furgonetas de gasolina y diésel. Esto es 10 años antes del compromiso actual del Gobierno para 2040.