En esta ocasión voy a hablaros del combustible alternativo más utilizado en el Mundo, pero desconocido para la gran mayoría de vosotros. El GLP (LPG en inglés) es una mezcla de butano y propano que se almacena a una presión de 10 bares, es decir, estado líquido. Es un combustible de origen fósil disponible en enormes cantidades en el planeta. También se puede llamar GLV, gas licuado vehicular.
Esta tecnología no tiene mucho que ver con el GNC (gas natural comprimido o gas natural vehicular), ya que en ese caso hablamos de depósitos a alta presión. El GLP se utiliza en motores de combustión interna por encendido de chispa, vamos, lo que viene siendo motor de ciclo Otto, o vulgarmente “gasolina”.
El GLP tiene una serie de ventajas ambientales y económicas que le hacen especialmente interesante, aunque aún dispone de ciertos inconvenientes que impiden su uso a escala masiva. De Pirineos hacia arriba, es decir, Europa, hay 7 millones de vehículos funcionando con GLP y hay más de 35.000 surtidores. En España habrá menos de 10.000 vehículos usándolo y unas 35 EESS que lo suministran.
¿Por qué GLP?
Empezaré por el argumento que primero os va a entrar por los ojos: su coste es un 50% inferior al gasóleo y actualmente es inferior a 0,50 euros/litro, es menos sensible a oscilaciones que el de gasolina o gasóleo. Es el combustible de automoción más barato que se suministra en nuestro país (y en otros tantos del globo).
Medioambientalmente hablando, es mucho más respetuoso. Las emisiones son más inocuas en casi todos los aspectos a los vehículos de gasolina o diesel, sin recurrir a costosas soluciones híbridas o eléctricas. Por otra parte, es muy fácil de obtener, ya que el proceso de refino del petróleo genera GLP y es posible obtenerlo también de yacimientos de gas natural.
Reduce en un 95% las emisiones de NOx (óxidos de nitrógeno) respecto a un diesel, las emisiones de CO₂ (dióxido de carbono) respecto a un gasolina la mayoría de los casos, apenas emite partículas, menos hidrocarburos sin quemar (HC), aldehídos, BTX... Sólo aumentan respecto a sus rivales el monóxido de carbono (CO) y amoníacos (NH₃).
Prácticamente cualquier vehículo con motor de gasolina puede funcionar con GLP, pero necesita una adaptación previa o estar fabricado pensando especialmente en esto. Los diesel no pueden funcionar con GLP debido a complicaciones técnicas que lo hacen inviable y en lo sucesivo consideraremos que no existen.
El GLP se almacena en un depósito adicional al de la gasolina, cilíndricos ubicados en maletero o toroidales (parecidos a un donut) en el hueco de la rueda de repuesto. Todo vehículo transformado pasa a ser bifuel: puede funcionar con gasolina o con GLP, usando un combustible a la vez, no mezclados, pero se puede cambiar en marcha.
La adaptación consiste en adaptar inyectores, conductos de bombeo de combustible, instalación de depósito y un conmutador que alterna un combustible u otro. El encendido del motor siempre se hace con gasolina hasta que el agua del refrigerante alcanza 40ºC. La autonomía se extiende al poder agotarse ambos depósitos. El depósito de GLP nunca se llena más de un 80% por razones de seguridad.
En términos de litros/100 km usando GLP existe un aumento respecto al vehículo de gasolina, pero queda compensado de sobra por el reducido coste del combustible, un 50% inferior de media. A cambio de una ligera pérdida de potencia a altas RPM (en torno a 3-10 CV) el motor pasa a tener un funcionamiento más suave y más enérgico a bajas RPM: más silencioso, menos vibrón y más duradero (con las piezas adecuadas).
No hay que temer por la seguridad del depósito, ya que cumple exigencias superiores a los depósitos de gasolina, que a fin de cuentas es un carburante peligroso. Eso sí, existen restricciones al aparcamiento en algunos sitios para estos vehículos ya que en caso de fuga se acumula gas a ras de suelo (es más denso que el aire).
Es sólo un poco más peligroso que fumar cerca de gasolina derramada o de dejarse el motor encendido en un garaje particular, útil para suicidarse. Los dudosos sobre su seguridad pueden mirar este informe del RACE. Como el metano y butano son inodoros se les añade sulfuro de mercaptano para que sean perceptibles al olfato.
El GLP en España hoy
De momento hay pocas estaciones de servicio, pero es algo que va en aumento. Repsol, que tiene el 80% del mercado de GLP, está ampliando el número de estaciones, y hay otras cuatro empresas que lo suministran. Es fácil encontrar EESS en ciudades grandes. El coste de adaptación del vehículo, en torno a 2.000 euros, puede sufragarse casi entero a golpe de subvención.
El IDAE, a través de las comunidades autónomas, da el 15% del valor del vehículo como subvención (hasta 2.000 euros), o 450 euros para adaptar un modelo que no es nuevo. El resto del sobrecoste se amortiza mucho más rápido que un diesel debido al bajo coste del carburante.
Otra pega es que si el motor no se diseñó desde el principio para funcionar con GLP puede sufrir averías en el sistema de inyección a largo plazo por corrosión, aunque el ahorro a lo largo de su vida útil lo compensaría. Según las previsiones más pesimistas, habrá GLP disponible más tiempo que gasolina o gasóleo al ser más abundante en reservas.
De serie o preadaptados de fábrica existen 54 modelos de 18 fabricantes como Citroën, Chevrolet, Fiat, Mercedes-Benz, SEAT, Škoda, Opel, Renault y Volkswagen. Hay que preguntar por ellos en el concesionario, y no están disponibles todos los motores gasolina, normalmente son los menos potentes.
Cuando veáis un taxista con motor gasolina, no os riáis de él ni penséis que está loco de remate, seguramente está utilizando autogás. Los taxistas fueron de los primeros usuarios que pudieron beneficiarse del GLP, la legislación ha sido el principal freno de este carburante en nuestro país. Pero las cosas están cambiando.
Es algo cercano al sueño de muchos automovilistas: usar un motor a gasolina sin sufrir por el consumo, a precio de repostaje en Estados Unidos, y contaminando mucho menos. Si se masificasen, los petroleros tendrían un durísimo rival en las gasolineras. Entiendo que este post generará muchas dudas y estaré encantado de resolverlas.
Más información | Motorgas, Repsol, Ministerio de Industria, Turismo y Comercio, Asociación española de operadores de GLP