Cuando Citroën anunció el lanzamiento de su línea DS, muchos pusieron en duda su viabilidad. Otras marcas como Renault, apostaban por el lanzamiento de marcas “low cost” como Dacia, mientras que Citroën apostaba, en tiempos económicos difíciles, por una línea que aportase algo más en cuanto a acabados, diseño, calidad de materiales...y precio.
El primer modelo de esta nueva gama ha sido el DS3, del que ya se han vendido más de 55.000 unidades desde que salió al mercado. Esta cifra, y los numerosos premios que ha recibido, indican que la apuesta de Citroën ha sido arriesgada pero acertada al mismo tiempo. El lanzamiento inminente del Citroën DS4 debería ayudar a reforzar este nuevo posicionamiento y a ampliar las ventas de la marca de los chevrones.
El Citroën DS3 recientemente ha sido elegido Coche del Año por la revista británica Top Gear, mientras que en España lo han galardonado las revistas Nuevo Estilo, Ana Rosa y Car And Driver, lo cual indica que no sólo ha calado entre los entusiastas de los automóviles, sino que ha conseguido conquistar otros territorios.
Así pues, no siempre lo más evidente es lo más acertado. No siempre lanzar una línea “low cost” en tiempos difíciles es sinónimo de pegar el campanazo, o si, pero también puede haber hueco para otro tipo de vehículos que se sitúen un escalón por encima de los generalistas, pero sin llegar al precio de las marcas Premium. ¿Alguien lo duda?
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