Presentado por Jaguar como el GT descapotable más rápido y potente de la historia de la marca, el nuevo Jaguar XKR-S Convertible ha hecho su debut en el Salón del Automóvil de Los Ángeles y completará la gama del más deportivo de los modelos de la marca del jaguar.
Por fuera recibe una estética muy parecida a la de su hermano de techo duro. Frontal rediseñado, paragolpes con entradas de aire laterales, capó ventilado, las llantas Vulcan de 20 pulgadas y el nada discreto alerón trasero cuya parte central es de fibra de carbono.
Bajo el capó monta el mismo 5.0 litros V8 sobrealimentado que el modelo de techo duro, que desarrolla nada menos que 550 CV y un par motor máximo de 680 Nm. Gracias a esto acelera de 0 a 100 km/h en 4,4 segundos y alcanza una velocidad máxima electrónicamente limitada de 300 km/h. El consumo mixto es de 12,3 l/100 km y emite 292 g/km de dióxido de carbono.
Jaguar ofrece seis colores de carrocería diferentes (entre los que se encuentra el Britsh Racing Green) y otros seis para la capota, que de serie es de color negro. La capota de lona se pliega y despliega de forma automática en sólo 18 segundos.
A pesar de perder el techo, Jaguar asegura que el chasis del XKR-S Convertible tiene una gran rigidez torsional. El jefe de ingenieros afirma que el XK fue diseñado para ser un descapotable, por lo que cuenta con una alta integridad estructural a pesar de los problemas que acarrea la falta de techo. El peso en vacío del vehículo es de 1795 kilogramos.
Entre el resto de datos importantes destacan las dimensiones de las gomas, que son 255/35 ZR20 en el eje delantero y 295/30 ZR20 en el trasero, y el potente sistema de frenos que cuenta con discos de 380 milímetros en la parte delantera y de 376 milímetros en la trasera junto a pinzas de aluminio y pastllas de mayores dimensiones.
En el interior predominan tanto el cuero como las inserciones de fibra de carbono y destacan los asientos deportivos (con 16 ajustes y calefactables) con reposacabezas integrados y perforaciones para poder montar arneses de competición. El volante en piel o la pedalera de acero inoxidable culminan el diseño.
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