La apuesta de Audi por la conducción autónoma es clara a estar alturas, y así lo demuestra la marca alemana en el Salón de Frankfurt, donde presenta, entre otras muchas, cosas una evolución del Audi e-tron Sportback concept que vimos en mayo en Shanghái. Se llama Audi Elaine concept y propone conducción autónoma de nivel cuatro y propulsión eléctrica.
La tendencia de futuro en el mundo del automóvil apunta a los SUV y los autónomos, y esto es precisamente lo que mezcla la marca de los cuatro aros para Frankfurt. Inteligencia artificial para conducción autónoma, autonomía eléctrica de hasta 500 kilómetros y una altura de la carrocería elevada, son algunos de los rasgos más significativos del Elaine.
Este prototipo es un anticipo del segundo modelo 100% eléctrico de Audi, con estética SUV con líneas de coupé. En este caso mide 4,9 metros de largo, 1,98 metros de ancho y 1,53 metros de alto, con enormes llantas de 23 pulgadas, y destacan elementos como los faros y pilotos Matrix LED, así como proyectores digitales capaces de lanzar mensajes proyectándolos sobre el asfalto.
Audi asegura que sus futuros eléctricos tendrán una configuración como la de este concept, es decir, un motor eléctrico en el eje delantero y dos en el trasero, y por tanto tracción total. El conjunto puede moverse entre 320 y 370 kW, es decir, de 435 a 503 CV, por lo que un 0 a 100 km/h en 4,5 segundos no es un problema. Su batería de 95 kWh, además, permite una autonomía superior a los 500 kilómetros (NEDC) y carga rápida con cable de 150 kW o bien carga sin cables (Audi Wireless Charging).
Inteligencia Artificial para la conducción pilotada
El sistema de inteligencia artificial de Audi, Audi AI, permitirá que el coche pueda realizar trayectos automatizados (en autopista, por ejemplo), o incluso sin pasajeros, para desplazarse hasta un aparcamiento multiusos "del futuro" que podría ofrecer servicios como un túnel de lavado o puntos de recarga de baterías, para que estos procesos pueda llevarlos a cabo el coche por sí mismo.
La función autopilotada para autopista, que no es más que una evolución de lo que ya ofrece el Audi A8, es capaz de cambiar de carril, y por tanto adelantar, de forma autónoma, aunque el "conductor" siempre puede tomar el control del coche, en cualquier momento. A esto hay que sumar todos los asistentes de seguridad y un sistema de infoentretenimiento con conexión a Internet para aprovechar al máximo el tiempo mientras el coche conduce por tí.
Además, el PIA o asistente personal inteligente, permite que el vehículo se adapte al patrón de comportamiento de cada usuario (identifica al usuario y carga su perfil) en aplicaciones como la navegación, la selección musical, la climatización, etc... Por supuesto, el coche estará también conectado a las infraestructuras (Car-to-X) para tener información del entorno en tiempo real.
Como otros fabricantes, Audi también presta atención al bienestar del conductor, con el Audi Fit Driver, que mediante una pulsera para el conductor es capaz de conocer su estado de ánimo o de salud, y poder reducir su estrés, por ejemplo, mediante consejos de respiración, funciones de masaje de los asientos, iluminación interior, etc...
Por último, el interior está protagonizado por grandes pantallas táctiles ubicadas en el salpicadero y también en los paneles de las puertas, que sirven para interactuar con los diversos sistemas del vehículo y reducen el número de mandos y botones.