Dos vídeos para aprender un poco más de Fórmula 1. En ellos el ex-piloto de F1 Martin Brundle utiliza un RedBull en Silverstone (un buen tanto para ellos; otros deberían aprender) para contarnos varias cosas. El primer vídeo explica en que consisten los temidos subviraje y sobreviraje, y como pueden resolverse. Para ello los mecánicos de RedBull reglan el coche provocando esos efectos voluntariamente.
En el segundo vídeo nos presenta los diferentes estilos de pilotaje de Button (clásico suave), Alonso (agresivo reactivo), y Schumacher/Raikkonen (manipuladores perfectos). Estos términos están extraídos de un artículo publicado en el número de enero de F1Racing, y que quién quiera profundizar en el pilotaje de un Fórmula 1 no debería perderse.
Nos pasamos los fines de semana de gran premio oyendo a los pilotos quejarse de subviraje (en la mayoría de los casos) y de sobreviraje (algo menos). Como dice Brundle en el vídeo, el santo grial de la F1 es la estabilidad, de nada sirven la potencia ni el agarre si el tren delantero y el trasero no funcionan conjuntamente y a la vez.
El subviraje lleva a Brundle fuera de la curva (volante en rojo) a la parte sucia, y hay muy poco que el piloto pueda hacer ya en plena carrera para solucionarlo. Previamente puede cambiarse el reglaje de la suspensión delantera, pero una vez en la pista lo único que puede hacerse es variar la incidencia del alerón delantero o rezar para que un nuevo juego de neumáticos aumente el agarre. Es el más temido por los pilotos en general.
En la segunda parte del vídeo provocan sobreviraje reduciendo la incidencia del alerón trasero, lo que provoca que Brundle tenga que hacer correciones en medio de la curva (de rojo a verde continuamente). Para resolver un hipótetico sobreviraje habría que cargar más el coche de atrás, para aumentar su agarre aerodinámico.
Al final el coche está perfectamente reglado, y el piloto puede darlo todo con plena confianza de que el coche va a hacer lo que él realmente quiere.
El segundo vídeo muestra tres diferentes estilos de pilotaje: el estilo de Button, clásico, frenando en líneas rectas antes de realizar el aporte de dirección, cuidando frenos y neumáticos, y luego acelerando tranquilamente para salir de la curva. Un estilo que sufre mucho si el coche no está perfectamente equilibrado, lo que puede pasar si cambian las condiciones de la pista, los neumáticos, etc. O sea, bastante a menudo.
Luego el estilo de Fernando Alonso, todo agresividad en el aporte inicial de dirección buscando el ápice, consiguiendo grip con el aumento de temperatura en los neumáticos delanteros, provocando subviraje en plena curva y máxima velocidad en el paso de la misma. Según dice Brundle, que nunca ha sido un gran fan del estilo de Alonso, “feo pero efectivo”.
Y al final el estilo de Schumacher y Raikkonen, con un continuo juego de gas, freno y aportes suaves de dirección antes, durante y después de la curva para estar en perfecto equilibrio y máxima velocidad. Y en el peor de los casos sólo sufrir un poco de sobreviraje que ayude en la salida de la curva.
Vía | SuitCase of Courage