Además de para presentar las innumerables novedades de los fabricantes más importantes del mundo, el Salón de Ginebra también ha servido a muchos preparadores para dar a conocer sus últimas creaciones, como es el caso del especialista Brabus, que muestra en la cita suiza una bestia basada en el Mercedes-Benz S 65 AMG. Se llama Brabus Rocket 900 y cuesta 347.719 euros en Alemania.
Este "cohete 900" de Brabus está basado en el S 65 AMG berlina, cuyo 6.0 litros V12 biturbo (630 CV de serie) ha crecido hasta los 6.3 litros para conseguir una potencia máxima de 900 CV y un par motor máximo de 1.500 Nm, nada menos, que ha de limitarse electrónicamente a "sólo" 1.200 Nm para preservar la transmisión. Homologa un consumo de 11,9 litros a los cien kilómetros, lo que corresponde a 279 g/km de CO2.
A pesar de la enorme potencia, la fuerza del propulsor sigue enviándose al eje trasero, a través de una transmisión automática de siete velocidades, modificada por Brabus para aguantar tal bestialidad. Gracias a estas mejoras, el Brabus Rocket 900 acelera de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos (seis décimas más rápido que el de serie), de 0 a 200 km/h en 9,1 segundos, y alcanza una velocidad máxima limitada de 350 km/h, frente a los 250 km/h a los que está limitado el modelo de fábrica.
Y una vez despachado lo importante, Brabus ofrece también un kit aerodinámico de carrocería con piezas de fibra de carbono vista, juegos de llantas monoblock de 21 y 22 pulgadas, suspensión neumática a medida (que rebaja en 15 milímetros la altura del S 65) y un interior de lujo, con sistema multimedia iBusiness, varias opciones de tapicería y un velocímetro que marca 400 km/h, entre otras muchas cosas.
En Motorpasión | Mercedes-Benz S 65 AMG 2014