Recarga de baterías de coches eléctricos y móviles en solo seis minutos. Esto es lo que asegura que ha conseguido la start-up con sede en Sawston (Reino Unido), Echion Technologies, que está preparada para comercializar el año que viene una tecnología que permite que los tiempos de carga de las baterías de iones de litio se reduzcan drásticamente.
Según explica la cabecera Cambridge Independent, los investigadores han desarrollado un tipo de polvo o sal que reemplaza el grafito dentro de las celdas de la batería de iones de litio y mejora la capacidad de recarga de una manera notable.
Un material 'secreto' que solo tendría que ser añadido a la batería tradicional
Según cuentan los investigadores, el cátodo seguiría siendo el de siempre pero introducen en el ánodo un ingrediente 'secreto' en forma de polvo o sal y del que no han desvelado detalles que sustituiría al grafito. Y es que el electrolito habitual de las baterías de litio es de sal de litio, un material que puede ser inflamable cuando se le somete a tiempos de recarga muy rápidos.
"El nuevo material, del que no puedo hablar más, aceptará la carga rápida sin riesgos de seguridad, a diferencia del grafito", explican desde Echion Techologies.
La compañía está trabajando actualmente en métodos para fabricar 1.000 toneladas de este material "con bastante facilidad", y ya cuentan con un prototipo que podría fabricarse a gran escala a principios de este año.
Aseguran que están desarrollando un componente clave que va a permitir aumentar el rendimiento de las baterías sin dendritas de litio peligrosas, sin necesidad de recurrir a materias primas caras o tierras raras y que simplemente se "colocan" en la celda de batería existente sin costes adicionales.
Esto permitiría reducir la recarga de las baterías de un vehículo eléctrico de 45 a 6 minutos. El invento ya cuenta con varios inversores, pero como todos los avances en materia de electromovilidad, tendrá que demostrar ser escalable y viable.