BYD sigue en su carrera por convertirse en el mayor fabricante de coches eléctricos del mundo. El año pasado ya superó a Tesla en ventas en el último trimestre y en todo 2023 firmó los 1,57 millones de cero emisiones entregados. Y este mismo mes de octubre coronó una semana con más de 100.000 eléctricos matriculados en todo el planeta.
Además de estar comiéndose el mercado, este gigante chino, también quiere tomar la delantera en tecnología de conducción autónoma. Tecnología que dice tener lista para producirla en masa.
No sólo para los coches más caros de BYD
Sí, Tesla ha presentado ya su primer robotaxi y espera que este Cybercab preste servicio en dos años, tres a más tardar. Pero en esa presentación poco detalló poco de su tecnología. De momento el Autopilot FSD sigue esperando su versión que permita conducir sin las manos en el volante como sí lo hacen el de Ford y el DrivePilot de Mercedes-Benz.
A la fiesta ahora se suma BYD. Los coches de la marca de alta gama ya incorporan avanzados sistemas de asistencia (los más baratos no tanto), pero hasta la fecha dependía de proveedores para esta tecnología. La receta del éxito de los fabricantes chinos es controlar toda la cadena de valor del coche eléctrico, así que no extraña que el gigante chino quiera tener tecnología puntera nacida en casa.
Según publica el medio CNEV, fuentes de la compañía habrían confirmado que BYD está lista para empezar a su propia plataforma de avanzada tecnología de asistencia. Se trata del sistema DiPilot, con diferentes versiones en función su capacidad de procesamiento y está basado en la plataforma Nvidia que consideran la más madura.
El DiPilot 100, con 100 TOPS (billones de operaciones por segundo) están basados en el chip Drive Orin N de NVIDIA, mientras que el DiPilot 300 y el DiPilot 600 hacen lo propio con chips Orin X de la tecnológica. Este algoritmo, desarrollado internamente, se señala que empezará a estar presente en coches de BYD desde noviembre.
Evitar la dependencia externa también les ayudará a reducir costes y a la postre, democratizar estos sistemas en los coches de su gama. Los coches más caros de BYD son los que ofrecen los sistemas de asistencia más avanzados: los que superan los 200.000 yuanes (unos 26.000 euros al cambio). Pero BYD, según estas informaciones, espera reducirlo a los que partan de 100.000 yuanes (13.000 euros) en su mercado natal. Al menos como un extra.
BYD ya ha superado a Tesla en otros aspectos. Por ejemplo la firma norteamericana anunció hace años la nueva generación del Tesla Roadster que está retrasando indefinidamente. Mientras BYD presentó a principios de este año el BYD U9, un superdeportivo eléctrico de 1.300 CV. Pero donde más duele es en ventas.
De momento Tesla respira tras un tercer trimestre con números mejor de lo esperado, superando los cosechados el año pasado, y con un beneficio neto de neto de más de 23.000 millones de dólares. Montante que se debe en gran parte a que lleva meses embarcada en reducir sus costes operativos más que a las propias ventas. No es que venda poco, pero sus previsiones eran más generosas.