La Fiscalía española considera necesario "que las Policías locales tengan más radares" a fin de reducir los accidentes en ciudad, dado que los consideran una herramienta esencial para combatir los excesos de velocidad.
Así lo ha confirmó el fiscal de sala coordinador de Seguridad Vial de la Fiscalía General del Estado, Bartolomé Vargas, tras reunirse este pasado jueves con el fiscal superior de Galicia, Fernando Suanzes, y responsables de Tráfico de la comunidad autónoma en el Tribunal Superior de Justicia de Galicia.
Vargas apuntó que "la estrategia de radares es primordial en la carretera y es casi todavía más esencial en el ámbito urbano", pues "la velocidad está presente en casi el 30 % de los accidentes".
En este sentido, según declaraciones recogidas por EFE, la Fiscalía "va a examinar la posibilidad de un compromiso en esta materia recabando información sobre los números de radares con los que cuentan los Ayuntamientos".
Más radares y límites de velocidad más restrictivos
Un reclamo que se produce en un contexto en el que está en marcha el Real Decreto de medidas urbanas de tráfico, donde se incluye entre otras la reducción de la velocidad en las ciudades a 30 km/h en vías de un carril por sentido. Este límite, a pesar de estar aún pendiente de aprobación, ya se ha implantado en un total de 19 ciudades españolas. Pontevedra es la más estricta con una limitación récord de 10 km/h.
Todo ello tras un 2018 que cerró con 1.806 personas fallecidas y otras 8.935 heridas leves en siniestros viales, unas cifras "inaceptablemente altas", en boca del ministro del Interior en funciones, Fernando Grande-Marlaska.
Además, las previsiones de futuro son poco halagüeñas aun con la entrada en vigor de otras medidas dirigidas a reducir la velocidad, como la unificación del límite de velocidad en todas las carretas convencionales a 90 km/h.
Pere Navarro, director de la DGT, ya anticipó el pasado mes de mayo que Tráfico fracasará en su intento de reducir a la mitad para 2020 el número de muertes y lesiones causadas por accidentes de tráfico, tal y como pide la ONU.
Cabe recordar que, actualmente, la DGT cuenta con más de 2.000 radares fijos repartidos por toda la geografía nacional a excepción de Cataluña y País Vasco, que tienen las competencias transferidas.
Otro aspecto donde la Fiscalía pretende ampliar la lupa es sobre los conductores que circulan bajo los efectos de las drogas o el alcohol, lo que supone el 60 % del total de los delitos contra la seguridad. De hecho, este es uno de los seis indicadores de la Estrategia de Seguridad Vial 2011-2020 que Tráfico sigue suspendiendo.
En este sentido, Vargas afirmó que "no puede haber impunidad con un delito tan grave" y resaltó que hay una cierta "banalización" del consumo de cannabis, a pesar de que es una sustancia "letal" al volante ya que "afecta a las facultades visuales y de concentración".
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