No descubriría nada nuevo si os digo que el Salón de Ginebra 2019 estuvo marcado por los coches eléctricos como principales protagonistas en cuanto a novedades. Pero más allá de los eléctricos y las miles de conversaciones que giraban en torno a la elección del Jaguar I-PACE como Coche del Año en Europa tras una reñida batalla con el Alpine que se decidió al desempate, Ginebra nos deparó muchas, muchas más cosas. ¿Te vienes a dar una vuelta rápida al Salón del Automóvil de Ginebra con nosotros?
El Palexpo donde se celebra cada año desde hace 89 el Salón del Automóvil más famoso de Europa, está situado en un recinto ferial contiguo al aeropuerto de la capital suiza. Aunque se puede ir andando de un sitio a otro, algo que no lleva más de 10 minutos, yo preferí coger un transfer que me habían ofrecido.
El conductor de la furgoneta me mete por uno de los aparcamientos posteriores, esos reservados a montadores y trabajadores de los stands. Lo adiviné porque la puerta para entrar al Palexpo no parecía demasiado grande y porque tuve que esquivar varias cajas con comida preparada para servir en algún stand. Bueno, eso y también porque tuve que atravesar por medio de un buen grupo de barbudos tatuados que fumaban fuera. Sí, son los montadores de stands, que cada año se encargan de que todo luzca perfecto allí dentro.
El Grupo Volkswagen se ha electrificado
Nada más entrar por esa puerta posterior, me encuentro en el stand de Škoda. Allí, además del Scala que luce en primera fila y los Kamiq, al fondo está el prototipo que acapara todas las miradas, y no solo porque a su lado haya una azafata y un azafato posando para las fotos, dejando claro que la marca checa ha roto con el pasado también en ese sentido. Hablamos del Škoda Vision iV Concept, un SUV de tamaño medio que adelanta cómo será el futuro 100% eléctrico de la marca, con cifras de 306 CV y 500 km de autonomía.
El Grupo Volkswagen ocupa toda la esquina del pabellón superior. Sus marcas están dispuestas unas al lado de las otras, como vigilando al resto del pabellón. Salto a la casa matriz, Volkswagen, donde el nuevo Touareg con el motor V8 TDI es la nota discordante que nos recuerda que a pesar de la llegada de los eléctricos, algunos diésel tienen todavía mucho recorrido por delante. Este con 8 cilindros, 421 CV y 900 Nm, es un magnífico ejemplo.
Mientras paseo por el stand, me tropiezo con el pequeño Volkswagen up! GTI, que es tan pequeño que ni siquiera lo veo. "¡Qué pena que no lo vendan en España!", pienso para mí. Creo que es la viva reencarnación del Volkswagen Lupo GTI que rompió moldes en su momento con sus 125 caballos en una carrocería tan pequeña.
No destaca especialmente el aspecto del renovado Passat como sí lo hace la autonomía de la versión GTE con hasta 55 kilómetros en eléctrico. Y en eléctrico te podrías ir a la playa en el futuro si algún día llegan a producir algo similar al Volkswagen ID Buggy. Ojalá sea así.
Antes de cruzar al stand de SEAT y Cupra, me encuentro con el Volkswagen T-Roc R, situado en posición desafiante justo enfrente. Con 300 CV es el primo primero del coche que le espera enfrente, el Cupra Ateca, al cual por cierto nadie presta atención ya que todas las miradas están fijadas en el Cupra Formentor.
Me paso un buen rato viéndolo, escuchando lo que la gente comenta sobre él y esquivando chinos que parecen salir de debajo de las losas de metacrilato que sirven de suelo a los stands. ¿Pero por qué han vuelto todos estos chinos a los salones del automóvil? Hace años, se especuló que era porque venían a copiar los coches. Tomaban medidas y fotos a todas las piezas, y los he llegado a ver metidos debajo de algún coche. Habían desaparecido, pero han vuelto. ¿Para quedarse? No creo.
Volviendo al Cupra Formentor, me encanta su diseño. Es sin lugar a dudas el SEAT o el Cupra con diseño más acertado desde que se presentaron los actuales León, y creo que si por ahí va a ir la línea de diseño de la marca en el futuro, le espera un gran futuro a SEAT.
Y si hablamos de futuro en SEAT, hay que hablar de El-Born, el otro coche que acaparaba todas las miradas. Mientras esperaba a que los chinos se bajasen de él y poder montarme para echar un primer vistazo a su interior, me imprimieron un bonito plano de Barcelona en una impresora 3D que decía "Created in Barcelona". Orgullo patrio.
El-Born, además del nombre de uno de los barrios más animados de Barcelona, también es el nombre del prototipo gemelo al Volkswagen I.D que se ha construido sobre la plataforma Modular Electric Architecture o MEB. Anuncia una autonomía de 420 kilómetros y 204 caballos de potencia. Mola, me gusta su diseño especialmente en la parte delantera. Perfectamente podría ser el SEAT Ibiza del futuro.
Imagino que el Seat Minimó Concept es tan mínimo o tan pequeño que ni siquiera lo ví antes de poner rumbo al siguiente stand del Grupo Volkswagen, en este caso Lamborghini. Antes de llegar a los de Sant'Agata Bolognese, paso por delante del pequeño stand de Bentley, donde el protagonista debía ser el Bentley Bentayga Speed, aunque a decir verdad todas las miradas se centraban en un precioso Bentley de competición de comienzos del siglo pasado, perfectamente restaurado y en posición preferente junto al resto de coches modernos.
En Lamborghini, la gente se agolpaba alrededor del nuevo Aventador SVJ Roadster, presentado en ese color dorado oscuro que flaco favor le hace a su estilizada figura, aderezada con mucha aerodinámica fabricada en fibra de carbono. Casi nadie veía la otra gran novedad, el Huracán EVO Spyder.
Sigo adelante y me planto en el stand de Audi. Así, de un primer vistazo, lo que más me llama la atención es un Audi A7 Sportback pintado en el color de moda, el llamado Miami Blue en Porsche y sus diferentes variantes entre otros coches del grupo. Levanto la vista y veo que los platos fuertes de Audi están al fondo.
El más destacado, situado en la esquina y con una ambientación más juvenil que rompe con el clasicismo de Audi, es el prototipo Audi Q4 e-Tron, que adelanta cómo será el segundo SUV 100% eléctrico de la marca alemana, que llegará en 2020 con 450 km de autonomía.
Me gusta su diseño, que no parece muy lejano del que debería adoptar el modelo de producción. Delante sigue estando la parrilla Singleframe, aunque con las lamas cerradas ya que no necesita servir de paso de aire hacia el radiador como en un coche de combustión tradicional. En la trasera, las ópticas me recuerdan un poco al Touareg, aunque entre ellas hay una línea de luces LED como dicta el nuevo lenguaje de diseño de Audi.
A su lado, la que tal vez sea la berlina conceptual más llamativa que he visto en los últimos años, capaz incluso de dejar a la altura del betún al Porsche Mission-E. Bueno, tal vez me he pasado, pero la realidad es que el Audi GT e-tron adelanta cómo será la gran berlina eléctrica de Audi. A su lado está el Audi e-tron Sportback que en este caso sí, como su nombre indica, nos sirve para imaginar la primera variante sobre la base e-tron, que dará lugar a un SUV de aspecto coupé para competir con los BMW X6, Mercedes GLE Coupé y demás artillería pesada.
Salgo de Audi viendo de reojo los A6, A7, A8 L y Q5 con una letra 'e' acompañando a la designación de modelo. Son las versiones híbridas enchufables que tanto esperaban.
Saliendo de Audi me encuentro el stand de Porsche. No veo grandes novedades, ni un coche rompedor de esos que te hacen ir a jugar el Euromillón, como el año pasado cuando presentaron el 991.2 GT3 RS o cuando hace algunos años presentaron en ese mismo escenario el 911 R. La mayor novedad es el Porsche 911 992 Cabrio, el cual probaremos por cierto la próxima semana. Otra novedad, el Porsche Macan S, que ya probamos a finales del año pasado. Se están reservando para el Taycan, que posiblemente se presente en el Salón de Frankfurt a finales de este año.
Sigo adelante y llego a Bugatti. Por lo poco que había podido ver por la mañana en Twitter, había leído que traían un one-off que costaba algo así como 16 millones de euros y era todo negro. Efectivamente, allí estaba el coche más caro del mundo. Si os digo la verdad, no me pareció más que un Chiron carrozado, eso sí, con una línea de luces posterior digna de museo. Mola, pero no como para pagar esa cantidad de dinero. Al menos no ahora que acabamos de pasar la cuesta de febrero y encaramos la cuesta de marzo.
Feliz 20 cumpleaños, Pagani Zonda
Por fin parece que he terminado los stands de la secta del Grupo Volkswagen, y me encuentro con Pagani. ¡Oh, Pagani! Para mí los Pagani son las auténticas obras de arte con ruedas de la actualidad. Mi sorpresa es ver que el Zonda ya ha cumplido 20 años, y lo celebran exponiendo el primero de los cinco Zonda C-12 fabricados, el coche que dio origen a lo que hoy es Pagani. Menuda maravilla. Inevitable recordar aquel día en el Circuito de Ascari con el Zonda R y el Zonda Cinque Roadster.
Vuelvo a la tierra y paso por Subaru, que presenta el Viziv Adrenaline. Se trata de un prototipo con forma de XV futurisa que, manteniendo cierta continuidad con el estilo propio de la marca, adelanta cómo va a evolucinar el lenguaje de diseño en sus creaciones de los próximos años.
Al fondo veo algo de revuelo. No es para menos, porque está el stand de Aston Martin. Presentan en sociedad el RB-003, que no es más que el hermano pequeño del Valkyrie. Se trata de un superdeportivo biplaza con motor V6 y otro eléctrico, que promete sensaciones fuertes y que tal vez si pasase por delante de tí, ni lo verías por lo bajito que es.
Doy por finalizado el pabellón de arriba y me voy a por el de abajo, más grande y con los stands más dispersos. Con un vistazo general desde las escaleras, se nota que hay ausencias destacadas. Este año no han estado en Ginebra ni Ford, ni Jaguar Land Rover ni Volvo. Son malos tiempos para algunos salones del automóvil.
Hasta FCA se electrifica
Aun así, hay cosas más que interesantes como para poder invertir un día entero en ese pabellón. Por desgracia, no tenía más de media hora, así que había que ser ágiles. Me encuentro de frente con Toyota, así que ya que estaba por allí, me acerqué a ver el nuevo Toyota Supra y confirmé en persona lo que me pareció en fotos. Está un poco desproporcionado y las formas son muy extrañas. Habrá que probarlo.
También están por allí los Corolla GR-SPORT y TREK, que parecen mucho más equilibrados que el Supra. Sigo hacia adelante y llego a Lexus. El LC descapotable es lo más destacado. Una pena, pero es así. ¿Qué pensará el LFA de todo esto?
No pierdo más tiempo y me voy al stand de FCA. Alfa Romeo tiene un coche que está despertando mucha expectación, el Alfa Romeo Tonale. Se trata de un hipotético hermano pequeño para el Stelvio, híbrido y enchufable.
La electrificación también llegará al grupo italiano, tal y como demostraba otra de las novedades que atraía más miradas, el Fiat Concept Centoventi. Supone una mezcla entre el diseño de los Fiat urbanos clásicos y el estilo minimalista que se aplica a los coches del futuro. Mola.
Si algún día vas al Salón de Ginebra y no sabes dónde está el stand de Ferrari, bastará con que busques la mayor aglomeración de gente y sabrás que estás en el sitio correcto. Miles de personas se agolpaban para ver el Ferrari F8 Tributo. Pude verlo unos 12 segundos sin que nadie me empujase, y me encantó su diseño, que hereda la parte posterior del 812 Superfast con sus cuatro ópticas redondas.
Al pasar por Rolls-Royce confirmo lo que había comenzado a sospechar una hora antes en el stand de Audi. El 'azul pitufo' está de moda en los coches y le sienta bien incluso a todo un Rolls-Royce Wraith.
Llego a Kia, donde están satisfechos por haber sido finalistas al Coche del Año en Europa con el Ceed, y por haber rozado la gloria con las puntas de los dedos. Entre las novedades destacan el Kia Ceed PHEV, un prototipo de modelo eléctrico de futuro llamado Imagine by Kia, el Kia e-Soul y el Niro 2019.
Cruzo en diagonal el pabellón y mientras me dirijo a Peugeot, fácil de identificar porque tenían un león gigantesco en medio del stand. Cuando digo gigantesco, me atrevo a decir que medía más de tres metros de alto y unos cinco de largo. De camino me encuentro con el New Stratos que tenía dos unidades en el stand, una de ellas decorada con los colores de Alitalia (el de la foto principal) con una parrilla de luces sobre el capó delantero, como si fuese un coche de rallyes. Y realmente lo es.
En Peugeot el e-legend no es el coche más bonito del stand. Menudo salto ha dado la marca de PSA en los últimos años. Buen ejemplo es el Peugeot 208, la novedad más importante del fabricante francés. Estrena un diseño fresco, atractivo, que le convierte bajo mi punto de vista en el coche urbano más bonito del momento. Además tendrá una versión 100% eléctrica a finales de este año.
Cruzo a BMW y confirmo que no huele a parrillada. Lo digo por el tamaño de las parrillas delanteras de sus últimos modelos, los Serie 7 y X7, que han hecho que las del X5 parezcan normales. Bromas aparte, el responsable de comunicación de la marca me lleva a la parte posterior del stand para que pueda ver tranquilamente un Serie 7 M760Li con detalles en negro, como por ejemplo la parrilla delantera.
Me gustaba en fotos, lo dije desde el principio, y lo mantengo después de verlo en persona. El Serie 7 ha ganado presencia con esta puesta al día a nivel de diseño y junto con el X7, acerca a BMW al segmento del superlujo.
Parrillas aparte, la novedades de BMW era el BMW X3 xDrive30e, la versión híbrida enchufable del SUV medio que acompaña a los X5, Serie 3 y Serie 7 híbridos enchufables. También estaban las versiones deportivas desarrolladas por BMW M GmbH, los espectaculares BMW X3 M y BMW X4 M.
Mercedes estaba al lado de BMW, y llegaba cargada de novedades. El CLA Shooting Brake es la más mundana, pero le acompañan otros como el Mercedes-AMG GT R Roadster, el Mercedes-AMG GLE 53 4MATIC+ o el GLC 2019.
Me queda poco tiempo así que voy a tiro hecho a ver dos coches a los que les tenía ganas. En Honda, no quería ver ni el NSX ni el Civic Type-R, el que quería ver era el 'e Prototipe', el pequeñajo urbano de aspecto retro futurista que promete unos 200 kilómetros de autonomía. Es tan bonito como en las fotos, y esperemos que el modelo de calle definitivo no difiera mucho de éste.
Por último, me voy a Renault, donde el nuevo Clio 2019 es el centro de atención. No es para menos, ya que además de nuevo diseño y dotación tecnológica, también adelanta que tendrá una versión híbrida en no mucho tiempo.
Y para cerrar esta vuelta rápida al Salón de Ginebra 2019, me voy a un stand muy especial, Hispano-Suiza. Allí, en el enésimo intento por resucitar la marca con una creación acorde al nombre y legado que representa, se presenta Carmen. Se trata de un prototipo de deportivo eléctrico que anuncia con 1.019 CV y un precio de 1,5 millones de euros. Bonito no es, o al menos a mí no me lo parece, pero al menos es otro intento por resucitar y no perder un nombre con tanta historia.
Así, entre eléctricos, electrificados y coches de combustión de los que todavía se tienen que vender muchas unidades en los próximos años, se acaba un Salón de Ginbebra 2019 que nos ha dejado muchas e interesantes novedades en un sector, el del automóvil, que está cambiando más rápido de lo que ha cambiado en toda su historia. Le pese a quien le pese, el futuro del automóvil es apasionante.