Honda presenta en España el Honda Jazz 2011, un modelo cuya principal novedad es la introducción del Honda Jazz Hybrid, por el momento el único vehículo híbrido del segmento B.
Además, toda la gama recibe algunos cambios estéticos que afectan tanto al exterior como al interior, de manera que ahora tiene un aspecto más parecido al resto de la gama Honda.
Por lo tanto, habrá tres motorizaciones disponibles 1.2 90 CV, 1.4 100 CV y 1.3 IMA 98 CV (Honda Jazz Hybrid). Durante la presentación en Barcelona únicamente pudimos probar las dos últimas versiones, que eran las que estaban disponibles.
Exterior del Honda Jazz 2011
El exterior recibe algunos cambios, que aunque son ligeros, consiguen rejuvenecer al Honda Jazz. Estos cambios afectan principalmente a los faros (con un toque rojo en las versiones convencionales), los paragolpes y la parrilla central.
Honda asegura que los cambios realizados en los paragolpes cumplen una función aerodinámica, ayudando a que el flujo de aire que transcurre por el Honda Jazz provoque menos turbulencias en la parte trasera del vehículo.
En la versión híbrida los cambios son más distinguibles, ya que los faros delanteros tienen un tono azulado. y las ópticas traseras son transparentes.
Además algunos colores estarán únicamente disponibles en la versión híbrida, como el Lime Green Metallic o el Deep Blue Saphire.
Interior del Honda Jazz 2011
En interior del Honda Jazz 2011 recibe ciertas modificaciones, pequeñas, que hacen que tenga un mejor aspecto, y en algunos casos, resulte más funcional (por ejemplo, se ha cambiado el mando del aire acondicionado para que sea de lectura más fácil).
Aunque el esquema básico de todo el salpicadero es el mismo, los materiales empleados son ahora más oscuros, y parecen de mejor calidad.
El interior del Honda Jazz destaca más por la calidad del ajuste que por la calidad de los materiales. Sirva de ejemplo el sonido que hacen las puertas al cerrarse, propio de un coche de un precio superior, o la solidez al tacto de las palancas ancladas en la columna de la dirección.
Además hay pequeños cromados que, siendo discretos, consiguen que parezca que el habitáculo está trabajado.
Es cierto también que hay algunos otros materiales de tacto duro en zonas menos visibles del habitáculo, pero acordes con un coche del rango de precio del que estamos hablando.
Tampoco me han acabado de convencer el tacto de algunos botones, algo imprecisos y con un recorrido amplio, que no permite saber con certeza cuando estamos activando la función que controlan.
Por contra, el puesto de conducción es satisfactorio. La posición de conducción es algo elevada, y es fácil encontrar una postura en la que nos encontremos cómodos. Todo queda a mano, y el volante (de buen un tacto bastante agradable), es fácil de manejar.
Los asientos son amplios, y no brillan por su capacidad para recoger el cuerpo, pero resultan suficientes para un vehículo de estas características.
Aunque las versiones híbridas tienen algunos detalles diferenciadores en el interior de los que hablaremos más adelante, hay una característica común que define el interior del Honda Jazz 2011, y es el sistema Honda Magic Seats.
Gracias a él, podremos configurar la posición de todos los asientos para obtener una mayor capacidad de carga, o para introducir objetos que debido a sus dimensiones, en principio no podríamos transportar.
De esta manera tendremos una capacidad de carga de 399 litros en las versiones de gasolina (303 en el híbrido), ampliables en ambos casos hasta los 1.320 litros (teniendo además un fondo completamente plano).
Por otro lado existen determinadas configuraciones que con permitirán llevar objetos muy largos (hasta 2.04 metros), o altos (hasta 1.28 metros disponibles entre el suelo y el techo).
Si de lo que se trata es de averiguar las diferencias entre la versión híbrida y la convencional, no tenemos más que fijarnos en el cuadro de mandos.
En la versión híbrida se incluye toda la información relativa al sistema de propulsión híbrida IMA (Integrated Motor Assist), que incluye una aguja que nos índica la dirección del flujo de energía (si estamos cargando las baterías o usándolas para alimentar el motor eléctrico).
Además todas las pantallas del interior lucen un azul eléctrico, mientras que las versiones convencionales recurren a un triste color ámbar que en mi opinión, resulta anticuado.
Por último, como ya es habitual en otras versiones híbridas de Honda, la iluminación del salpicadero se tornará azul si conducimos de manera poco eficiente, y verde si es al contrario.
Esta función se engloba dentro del sistema de ayuda a la conducción eficiente Eco Assist, del que hablaremos en la siguiente parte, en la que hablaremos de las impresiones de conducción que nos transmitió el Honda Jazz, especialmente en un versión híbrida.
En Motorpasión | Honda Jazz 2011, presentación y prueba en Barcelona (parte 2)