El BMW M5 E39 y su V8 atmosférico es uno de esos icónos que ha forjado la leyenda de los BMW M. También es un coche que tiene sus años a sus espaldas, estuvo en producción de 1998 a 2003. Eso explica que actualmente se puedan encontrar unidades a la venta que van desde 15.000 euros. Casi una ganga.
Salvo cuando el concesionario oficial BMW te pide luego 17.000 dólares para una puesta a punto completa del coche. Es lo que le pedían en BMW a Alex Palmieri, de Legit Street Cars, por arreglar su M5 E39 de casi 660.000 km. ¿Tanto pide un concesionario? ¿Se puede hacer por menos? Pues viendo el vídeo de Legit Street Cars, todo es posible.
Alex compró uno de los M5 E39 más baratos que pudo encontrar, es algo muy habitual entre los youtubers estadounidenses que hablan de mecánica y coches en general. Además, lo de efectuar uno mismo y arreglar todo lo que uno mismo pueda de su coche, es algo muy arraigado en la cultura automovilística estadounidense.
La sinopsis es la misma en casi todos los casos. El youtuber compra un coche un tanto especial, en general un coche de lujo algo cool y cuyo valor está por los suelos, y se pone a mirar todo lo que falla -o no- y a arreglarlo. De paso, siempre está bien tener el presupuesto de un taller oficial o bien de un especialista en la materia.
En este caso, a Alex Palmieri, el presupuesto asciendo a los 17.000 dólares. Entre los numerosos puntos del M5 que necesitaban atención, nos encontramos con unos catalizadores que no están, una junta de culata que hay que cambiar, una correa de sistemas auxiliares, un sensor de airbag y algún que otro silent bloc y bombilla de piloto trasero que cambiar.
Spoiler alert: Alex arregló finalmente su coche por 675 dólares de recambios. Nada más. ¿El truco? De entrada, posee su propio garaje-taller y no tiene que alquilar un box, como suele ser el caso en las grandes ciudades si quieres arreglar tu mismo tu coche.
Si no lo arreglo, no me cuesta
Y luego, hay elementos que ha decidido no arreglar. De momento, no volverá a instalar catalizadores. Es un elemento que, lo mires por donde lo mires, es carísimo debido entre otros a los materiales que usa. En este caso, BMW pedía casi 5.000 dólares por los dos. Tampoco arregló el sensor del airbag, un elemento que le costaría algo más de 2.000 dólares.
En ambos casos, es posible encontrar esos recambios de segunda mano o reacondicionados. En todo caso, son piezas que siempre es recomendable comprar nuevas, especialmente el sensor de airbag. No es algo con lo que quieras jugar (el propio Alex, lo reconoce, por cierto).
Es decir, se ha dejado en el tintero reparaciones recomendadas y que sabe que hay que hacer por valor de casi 8.000 dólares. Y además, no contabiliza las horas de mano de obra, pues las pone él de su tiempo.
Sin embargo, su vídeo es interesante porque muestra como muchos talleres, sean oficiales o no, se han convertido en simplemente un negocio en el que se sustituyen piezas, sin realmente buscar si es preciso hacerlo o no o si se puede arreglar de otra forma.
Este taller BMW recomendaba cambiar las juntas de culata porque el motor sudaba aceite por arriba. Con la certeza de que no podía ser así, pues habían sido cambiadas recientemente, Alex descubrió que era simplemente un tapón de llenado de la boca de aceite defectuoso. Da que pensar.