"Álex Palou es tan bueno como Fernando Alonso a su edad". Con esa frase tan contundente presentaba Adrián Campos, ex piloto de Fórmula 1 y descubridor de ambos talentos españoles, a Álex Palou en abril de 2014. Por entonces el barcelonés acababa de cumplir 17 años y tenía una prometedora carrera por delante.
Seis años después, Palou ya es un piloto hecho y curtido, que ha descubierto lo duras que son las categorías inferiores del automovilismo, pero que no tuvo miedo a emigrar a Japón y eso le ha proporcionado su primer asiento en un gran campeonato. En 2020 debutará en la IndyCar haciendo la temporada completa con el equipo Dale Coyne Racing.
"Quiero ser el rookie del año y, a final de temporada, hacer algún podio"
- Cuéntanos, ¿qué tal estás llevando la cuarentena?
No es ideal para nadie. Lo que más ha costado es que hasta ahora no podía salir, no podía hacer deporte. Solo lo que podía hacer en casa, dónde tengo un rodillo, una bicicleta y un TRX, pero nada como ir al gimnasio o hacer deporte al aire libre. Suerte que esta semana ya estoy saliendo cada día a correr. Nos han enseñado lo importante que es salir a la calle, he aprendido que tengo que salir cada día. Estoy mucho mejor, preocupado por saber si voy a poder ir a Estados Unidos o no. Estoy como todo el mundo, esperando a que vuelva la normalidad.
- Precisamente te quería preguntar por cómo llevas la preparación física. Otros pilotos nos decían que no tienen material en casa
Ese es el problema. Para un día sí que te da, con una hora de bicicleta o un TRX haces cuatro o cinco ejercicios, te cansas un poco y te mantienes activo. Pero una semana, dos, tres... ya llegas a un momento en el que no puedes mejorar. Te intentas mantener. Ha sido duro, porque cansa estar en una habitación encerrado, donde no corre el aire, dándole a los pedales mirando una pantalla. Pero tampoco me puedo quejar. Hay gente que no tiene ni eso. Yo tampoco tenía bicicleta, pero unos amigos me pudieron dejar una. Poder salir a correr me está dando la vida.
- Te vimos este fin de semana en las 500 millas de Indianápolis virtuales, vaya la que se ha liado
Sí, se lió una muy buena. Fue una pena por dos cosas. Primero por mí, por mi resultado, porque iba súper rápido, tuve dos toques con el mismo piloto, no sé si tenía algo conmigo... Íbamos súper rápidos, para luchar por el podio, pero bueno. Fuera de esto, sí que quedó muy mal lo que pasó en las últimas vueltas. Es lo que hay, yo no puedo controlarlos. Fue una rabieta que cogieron Simon (Pagenaud) y (Santino) Ferrucci. No se entiende, porque son cosas que quedan súper mal. ¿En qué momento se te ocurre esperar al que va primero para echarle? Puedes decirle una cosa si ha hecho algo que te parezca mal, pero echarlo es demasiado. Seguro que el equipo, o algún sponsor, le dice algo. Lo veo como una tontería, que por un simulador, que es algo para entretenernos nosotros y los fans, la líen de esta manera. No mola.
- ¿Cuándo volveréis a correr? ¿Qué te dicen? En principio empezáis el 6 de junio en Texas...
Sí, dijeron eso hace dos semanas y lo mantienen. Pero no saben aún cómo lo van a hacer, si va a ser de un solo día, hacer entrenamientos libres, clasificación y carrera e irnos para evitar que todo el equipo se traslade a un estado diferente y pasen allí unos días. Esta semana supongo que nos dirán si seguimos adelante o lo tiran para atrás. Yo estoy preocupado por poder ir a Estados Unidos o no. Quedan solo tres semanas y media, así que no lo veo muy bien.
- Tú estás en Cataluña, ¿qué sabes al respecto de todo el problema con las fronteras?
Está el tema fatal. Lo veo mal. Lo bueno es que tengo visado de deportista para Estados Unidos. Al ser para un evento deportivo, espero que hagan alguna excepción. Tenemos que buscar alguna solución de aquí a dos semanas, alguna habrá. Pero a día de hoy no puedo ir a Estados Unidos.
Tonight at 20:30 we are racing in Indianapolis, you can watch the race live here: https://t.co/QIzwEhBBuo 😏
— Alex Palou Montalbo (@AlexPalou) May 2, 2020
Don’t miss the show! 😛#IndianapolisMotorSpeedway pic.twitter.com/ziRxqHs9Iw
- Cuando vuelvan las carreras, ¿qué objetivos te planteas para este 2020?
Va a ser atípico. El campeonato era muy extenso, con 17 carreras en total. Me lo podía tomar con calma, porque si tienes 17 carreras te puedes tomar dos o tres para conocer a la gente, no necesitas ningún resultado súper rápido. Ahora nos han quitado carreras y circuitos donde íbamos a ir bien, como Austin, que era un circuito normal, no urbano, donde la experiencia se nota. Hay dos o tres circuitos donde sabíamos que íbamos a ir bien y nos los han quitado.
Pero al final el objetivo es ser rookie del año, que allí en América está muy bien valorado. Y luego tenemos que intentar al final de año hacer algún podio y luchar por buenos resultados. Tenemos un coche suficientemente bueno como para ser rápidos, estar en el top seis y, con una estrategia buena y una carrera currada, podemos ir a por la victoria. Necesitamos un resultado así para poder quedarnos en IndyCar.
- ¿Qué te dicen en el equipo? ¿Qué objetivos te ponen ellos para tu debut?
No dicen nada, no marcan nada. En los test fuimos muy bien, están súper contentos. Nadie se marca objetivos al principio del año, o al menos no los dicen. La cosa es hacer un buen papel y ya está. No hacer cosas estúpidas y estar delante. Eso es básico para que te den otro año. Si no estamos delante, ya pueden tener las ganas que quieran, que si no hay resultados no nos van a dar otro año.
- ¿Cómo afrontas correr una carrera mítica como las 500 millas de Indianápolis?
Me hace muchísima ilusión. Es una de esas cosas que miras en la tele, como Le Mans, pero aún más. Lo ves cada año, hay mucha gente, todo el mundo está pendiente... Es como la Super Bowl, o la final de la Champions, que aunque no seas futbolero la miras. Pues aunque no seas mucho de IndyCar, miras las 500 millas. Formar parte de ello es una locura, un sueño. Nos lo vamos a tener que currar para hacer un buen papel. Primero hay que clasificarse. Creo que va a ir muy bien, el equipo tiene un buen coche de oval, que eso es muy importante. Va a faltar experiencia, eso ya lo sabemos, pero es lo que hay. Tenemos que pasar por eso. Todos los pilotos han pasado por esa primera vez, así que la cogeremos con muchas ganas.
- Se han cancelado ya cuatro carreras que son por esas fechas, pero las 500 millas solo se suspenden hasta agosto
Hay muchos equipos, como el nuestro, que son los de media tabla y los pequeños, que viven solo de esa carrera. Hay premios y sponsors en esa carrera de los que el equipo puede tirar para todo el año. Es un evento súper importante. Si solo se pudiera correr una carrera, sería esa. Estoy seguro de que esa carrera se va a correr, la cosa es cuando. De momento está en agosto, pero serían capaces de ponerla hasta en diciembre. Esa se va a hacer seguro.
- ¿Da respeto una carrera como las 500 millas de Indianápolis?
Sí, da respeto porque sabes que vas súper rápido. Todo el mundo tiene que ir al límite y para ir rápido tienes que ir quitando aerodinámica, lo que significa ir perdiendo control sobre el coche. La dinámica es esa. Más velocidad, menos control, más velocidad, menos control... hasta que llega un punto en el que ya te pasas y entonces bajas. Tienes que llegar a ese punto. Así que respeto sí, pero miedo no.
Me gustan mucho los ovales por la única experiencia que he tenido en un test. Va a ser súper divertido. No vamos a ganar esa carrera, eso lo tengo seguro. Queremos ganar, obviamente, pero no es el objetivo de esa carrera. Tenemos que coger experiencia, acabar en la vuelta del líder, estar en el top diez, que ya sería una pasada, y aprender un montón a ir con los otros coches y la estrategia. Nos lo podemos tomar con un poquito más de calma que otros que tienen que ir a ganar sí o sí.
- Ya está confirmado que va a estar Fernando Alonso, con toda la expectación que eso genera en España. ¿Lo ves como una opción para lucirte?
Que Alonso esté ayuda un montón, tanto a mí como al equipo y a todo el campeonato. Pero sobre todo a mí, porque más gente va a ver que en las 500 millas de Indianápolis está Alonso y otro español. Y ese español voy a ser yo. Así que viene súper bien. Él sí que va a ganar, si hace top diez no le sirve de nada. De hecho, seguramente, le parecería una derrota. En cambio nosotros si hacemos un top diez y estamos delante de él, o luchando, va a ser una victoria. Para mí es todo bueno. Él lo ha hecho ya dos veces, nosotros ninguna, así que todo lo que hagamos será bueno.
- ¿Cómo surgió la posibilidad de ir a la IndyCar?
Es algo que perseguía desde hace muchos años. Yo siempre había dicho que es lo que yo quería hacer, porque sabía que era la única opción de que hubiera una persona que conociera a otra persona que conocía a una persona que tenía un equipo o conocía al director de equipo. Y así fue. Hablando con la gente de la IndyCar me dijeron que me podían conseguir un test. Lo hicimos muy bien, y luego estuvimos luchando desde verano hasta noviembre para tener un asiento. Lo conseguimos. Fue duro, no me lo esperaba tan pronto. Esperaba estar un año más en Japón y seguir trabajando con los americanos. Pero mira, cayó. Así que estoy súper contento.
- ¿Has notado ya ese concepto diferente de las carreras y del espectáculo que tienen en Estados Unidos?
Es muy diferente al de Europa. De hecho, ya Japón es diferente a Europa. Son tres conceptos de carreras diferentes, aunque al final son duras y del mismo estilo. La forma en que está estructurado el paddock, los equipos y los pilotos en América es la mejor. Si tienes un simple ticket de pelousse, donde no tienes ni asiento, puedes entrar al paddock, ver a los pilotos, a los coches y hasta, si se te va un poco, puedes tocar los coches. Eso no pasa en ningún otro sitio del mundo. Es muy bueno, porque a la gente que va a las carreras les gusta ver un coche que parece un prototipo, un Fórmula. Lo tienen muy bien montado, el espectáculo es lo más importante, que la gente disfrute. La relación entre los pilotos es increíble, todos los pilotos hablamos. Ahora, después de las carreras en el simulador, creo que hay algunos enfadados, pero seguro que se les pasa (se ríe). Es muy bueno ver como todos los pilotos hablamos y estamos unidos, porque la imagen para el espectador es mejor.
- ¿Es un cliché eso de que el espíritu americano es más espectáculo que competición? A su forma, está relacionado con lo que pasó en la carrera virtual
Sí pero no. Lo que pasó fue una rabieta porque tuvieron un toque antes y ya se cruzó. Lando también le contestó mal, porque nosotros tenemos una radio todos juntos. Le algo como que "son carreras y esto es lo que hay", y el otro quiso estampar a Norris. Está mal, sí, pero es lo que hay.
Pero sí que es verdad que se centran mucho en el espectáculo. Somos el único campeonato que ha organizado un campeonato invitando pilotos de otros sitios, de la NASCAR, de la Fórmula 1... Se lo han montado bien. Otros han hecho un campeonato virtual y lo han dejado ahí para que se apunte la gente. Estos se lo han montado bien, lo han organizado muy bien y lo han retransmitido por todas las televisiones en América. Han tenido un gran impacto.
- ¿Con qué sensaciones saliste de los test de pretemporada?
Muy buenas. Estaba súper contento. Aún me faltaban kilómetros con el coche y con el equipo, pero contento. Acabamos novenos en Austin. Estuvimos todo el día en el top tres o top cuatro, pero al final la pista se estaba secando, hubo tres banderas rojas y no pude usar los tres últimos juegos de neumáticos. Pero bueno, da igual. También le pasó a otros pilotos. Lo importante es que estuvimos todo el día arriba, demostrando que íbamos rápido incluso cuando solo estábamos adaptándonos al coche. Creo que va a ser una temporada buena.
- ¿Qué diferencias hay entre pilotar un IndyCar respecto al GP3, al Fórmula 2 o al Super Fórmula?
Todos son diferentes. El Super Fórmula es bastante más potente que el Fórmula 2. Si comparamos el Super Fórmula con el IndyCar, son coches muy distintos. El Super Fórmula tiene poca potencia, mucha aerodinámica y poco peso. En cambio en la IndyCar tenemos casi 200 CV más, pero tenemos mucho peso y poca aerodinámica. El peso es tan alto para proteger a los pilotos en los ovales. Todas las cosas de fibras en vez de tener dos capas tienen diez. De hecho, se nota cuando tocas el coche, se ve que es súper duro.
Son muy divertidos de conducir, tampoco tienen dirección asistida, así que el volante está mucho más duro. El IndyCar es muy divertido, porque es como un kart, está moviéndose todo el rato, tienes que ir controlando el límite con el volante. Un Super Fórmula es mucho más parecido a un Fórmula 1, está siempre por debajo del límite, confiando en la aerodinámica. Si te pasas un poco se te va el coche. Sin embargo, con el IndyCar estás siempre sobrepasando el límite, por eso se mueve tanto.
- ¿Qué sensaciones te deja el nuevo aeroscreen que lleváis como protección?
Es la primera vez que lo pruebo y está súper bien. Teníamos un poco de miedo todos, porque al final es un halo como el de Fórmula 1, pero con una pantalla. Las pantallas, como pasa en los coches de calle, a veces dan reflejos. Nuestra visión es muy pequeña, no tenemos un parabrisas enorme, sino una pantalla muy pequeña. Pero la verdad es que no había reflejos, está súper bien. No se nota la diferencia entre el halo y el aeroscreen. La única diferencia es la temperatura, porque como no te corre el aire hace mucho calor. Ese es el único problema, que hace calor ahí dentro.
Pero si va a salvar una vida por una pieza que en vez de darte en la cabeza le da al aeroscreen, pues ya es bienvenido. Es un muy buen paso. Hay gente que dice que queda feo, pero quedará más bonito cuando vaya a salvar una vida. La gente se dará cuenta de la importancia que tiene. No es lo mismo una carrera en un circuito normal, donde si te da una pieza lo hace a 150 km/h, que si te da en un oval a 350 km/h. Ahí sí que te puede hacer daño.
I always kept an eye to my competitors. 😜
— Alex Palou Montalbo (@AlexPalou) February 25, 2020
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- ¿Cómo ves la situación de las categorías inferiores del automovilismo ahora que has conseguido llegar por fin a una categoría grande como la IndyCar?
La situación está súper jodida. Yo llegué justo en el momento en el que se empezaba a poner muy jodida. Hay equipos que cuestan el doble y tienen un coche que siempre está entre los tres primeros. Si ves una clasificación de Fórmula 3 o Fórmula 2, la clasificación es por equipos, no por pilotos. Miras quien ha ganado y ves al equipo rojo, al equipo azul y al equipo amarillo. Se ordenan los pilotos de dos en dos. El dinero hace que si puedes estar en este coche vas a ganar, o a ser segundo si tu compañero va un poco más rápido, pero ya está. Si tienes menos dinero, vas bajando posiciones de dos en dos. Y cada vez va a más. Cada vez los equipos ricos tienen más dinero y cogen a pilotos que ponen más dinero, y así van creciendo. Los pequeños al revés, así que cada vez hay más diferencias.
- ¿Es difícil llegar solo por tu talento? Aquí tenemos el caso de Roberto Merhi, que llegó a la Fórmula 1 pero con un coche muy flojo
Cada vez es más difícil. La única opción que tienes es que de pequeño te coja Red Bull, que es el único que te puede llevar arriba. Si no, estás bastante jodido. Lo de Merhi fue lo mismo. Aún así se lo montó muy bien con lo que tenía, porque estaba en la DTM cuando volvió a los Fórmula. Se le juntó todo. Lo hizo súper bien y le dieron la oportunidad. Sí, con un coche que iba cuatro segundos por vuelta más lento, pero bueno, llegó, que ese era el objetivo número uno. Se lo montó muy bien y lo hizo súper bien. Fue una pena, pero al menos estuvo ahí.
- Cada vez Japón es más una vía de escape de toda esta maraña de las categorías inferiores del automovilismo
Sí, ahora muchos pilotos europeos se van para allá. Han visto que allí los equipos están igualados. Si miras las clasificaciones, ahí da igual el equipo. Había uno o dos coches que eran peores, pero todos los demás equipos estábamos igual. Es un campeonato súper bueno, hace carreras de una hora y media con cambio de neumáticos, repostaje y el coche es increíble de conducir. Así que es una muy buena categoría, para mí mucho mejor que la Fórmula 2.
- ¿La vía de la Fórmula 1 la tienes descartada?
Totalmente descartada. No es una cosa que persiga o quiera. Todo el mundo quiere, hasta la gente a la que no le gustan los coches quiere ir a la Fórmula 1, pero no es mi caso. Hace ya muchos años. Empecé con los Fórmulas antes de enterarme de cómo funcionaba el mundo. Cuando lo hice, el objetivo más grande que me puse fue la IndyCar. De momento el objetivo está medio cumplido, porque aún no hemos debutado, pero nos centramos en la IndyCar, en América, y tenemos que hacerlo bien para quedarnos los más años posibles. Pero no estamos yendo a IndyCar para volver a la Fórmula 1 o a Europa, sino para quedarnos ahí.
- Desde hace años Adrián Campos te define como un gran talento. Y hace unos meses dijo que eras su primera opción si salía adelante el proyecto de su equipo de Fórmula 1, Campos Racing
Eso está bien, que se hable de ti. Es bienvenido. Pero no puedes centrarte en un hipotético caso de un proyecto. Al final te centras en lo tuyo y si algo viene, me lo tendré que pensar. Tú mismo has dicho lo de Merhi, que fue una pena que estuviera en la Fórmula 1 con un equipo que no podía hacer nada y que duró cuatro carreras y se fue para casa aún peor de lo que estaba antes de ir a la Fórmula 1. Ese es el riesgo de ir con un equipo que no funciona, que parece que lo hagas todo mal. En cambio, si te quedas en IndyCar lo haces bien, ganas carreras, te lo pasas bien, estás contento... Yo creo que es mucho mejor proyecto que un hipotético proyecto en la Fórmula 1.
- Vas a llevar el número 55, como Carlos Sainz. Tendremos al mejor piloto español de Fórmula 1 y al mejor de IndyCar con el mismo número
(Se ríe) Sí, no ha tenido nada que ver con él, ha sido una coincidencia. Tiene una historia detrás. El equipo que nos apoya desde Japón se llama Goh. Goh en japonés significa cinco, así que queríamos el número cinco. Como ya está cogido, pedimos el 55, que significa GohGoh en japonés. Así que por eso llevamos el 55.
- Pues ojalá que te dé mucha suerte. Estaremos pendientes de tus carreras aquí en España
Perfecto, muchísimas gracias.
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