Oficialmente, Nissan no venderá el nuevo Nissan Z de 400 CV en Europa. Es una pena para los pocos aficionados que quedan y que están dispuestos a comprar un biplaza. Sin embargo, no está todo escrito y en Nissan pueden cambiar de opinión. Y al parecer, la red comercial europea está presionando para conseguirlo. La decisión, en principio, se debe en parte a las pocas ventas del segmento.
Viendo las cifras de ventas de los coupés en 2019 -por tanto antes de la pandemia-, los tres coches más vendidos del segmento de los deportivos no de lujo eran el Ford Mustang, el Mazda MX-5 y el Audi TT. Y los tres se movían entre 10.000 y 13.000 unidades al año. Ese año Nissan consiguió colocar unas 562 unidades en todo el continente del Nissan 370 Z.
En 2020, lógicamente, la cosa empeoró. Audi colocó 5.518 unidades del TT y Alpine tan solo 1.329 unidades del A110, cuando en 2019 fueron más de 4.000 ejemplares. El Toyota Supra no alcanzó ni las 1.000 unidades vendidas, se quedó en 954 unidades. Una cifra a comparar con las casi 6.000 unidades vendidas en Estados Unidos. En esas condiciones, es lógico que Nissan no se plantee vender el nuevo Z en Europa.
Sin embargo, no deberíamos descartar del todo su llegada a nuestro mercado a medio plazo, una vez sus ventas en Estados Unidos se hayan iniciado. Es evidente que si finalmente llega a Europa no será por una cuestión de volumen, no es un Audi TT o un Ford Mustang, sino por una simple cuestión de imagen.
La necesidad de vender coches gasolina para financiar los eléctricos
Nissan, como todas las marcas, están inmersas en un proceso de electrificación forzada. Todo va para el coche eléctrico, pero son los coches con motores de combustión interna que deben financiar la transición eléctrica. En los grupos Volkswagen y Stellantis lo han entendido muy bien.
Si miramos las gamas de los nuevos modelos, ya sea en Volkswagen , SEAT, CUPRA o en Peugeot y DS, por ejemplo, veremos que las gamas en gasolina o diésel se componen de motores de pequeña cilindrada y precio contenido para luego saltar a modelos de mucha más potencia y de precio mucho más elevado.
Si miramos el caso del SEAT León y CUPRA León veremos que en SEAT, el León tiene motores que van desde los 90 hasta los 150 CV. Solo los acabados más completos del motor de 150 CV se acercan a los 30.000 euros. Más allá están el León eHybrid de 204 CV que supera los 30.000 euros y los CUPRA León cuya gama que va de los 204 CV hasta los 300 CV cuesta desde 38.500 euros a más de 42.000 euros.
El truco es seguir vendiendo coches con motores de gasolina o diésel a precio asequible, el corazón del mercado está entorno a coches de 20.000 euros, mientras que los modelos más deseables generen más margen de beneficio.
En ese contexto, Nissan no debería dejar pasar la oportunidad de traer el Z a Europa, aunque sea por imagen, como hizo en su momento con el Nissan GT-R. Dentro de unos meses veremos finalmente qué han decidido en Nissan.
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