Se ha hecho de rogar, pero por fin ha llegado el día (o la noche más bien) en el que hemos conocido la tercera generación del Nissan LEAF. Uno de los vehículos 100% eléctricos más esperados de los últimos años en lo que a popularidad se refiere, y es que no en vano se trata del eléctrico más vendido a nivel mundial desde que se presentase por primera vez en 2010.
Esta tercera generación llegará al mercado europeo en enero de 2018 y lo hará con mejores argumentos para que los eléctricos sigan convenciendo al público, con más tecnología que le convierten en un referente dentro de la marca y una sencillez de conducción que le harán perfecto para los entornos urbanos.
Nissan LEAF 2018: un eléctrico que quiere ser aún más popular
Si había un aspecto criticado en el LEAF era su estética de compacto eléctrico, así que para este nuevo modelo en Nissan han querido diferenciarse y lo que han conseguido es una especie de hibridación entre el LEAF anterior, el Micra y el Pulsar. ¿Ha mejorado? Sí. ¿Suficiente como para dejar de levantar críticas? No del todo.
La influencia de los últimos diseños de Nissan, marcado en gran parte por el prototipo SWAY y recogidos por primera vez en un coche de producción en el nuevo Micra siguen presentes en la renovación del LEAF, aunque no acaban de transferirse en su totalidad.
En la parte delantera los grupos ópticos LED se rasgan y convergen sobre una gran parrilla central en forma de V acabada en negro (y efecto tridimensional con tonos azules, de estreno para los modelos eléctricos de Nissan) con labios muy marcados que junto a la zona inferior casi horizontal del paragolpes le dan un aspecto mucho más moderno. En la trasera los pilotos adoptan forma de L, se incluye un alerón integrado en el techo y un difusor en la zona inferior.
Precisamente la parte superior (al menos la mostrada en las imágenes) nos muestra un acabado negro, una pintura bitono que se extiende desde los pilares A hasta la mitad del portón trasero para tratar de aligerar la impresión de monovolumen compacto y aportar un aire más fresco y deportivo. Las llantas de aleación de 16 pulgadas también son bitono (de 17 pulgadas en opción), y los colores a elegir entre monocromáticos o de dos tonos combinados (no todas las cobinaciones de la galería llegarán a Europa).
Por dentro el LEAF luce ahora un interior completamente rediseñado para dejar un mejor sabor de boca a sus ocupantes, más premium. Materiales de mejor calidad y un entorno más apetecible tanto para conducir como para dejarte llevar.
El negro se ha instaurado como el color predominante de serie (otro acabado en gris opcional) salvo pequeñas inserciones en el volante y en los marcos de los aireadores y el sistema de infoentretenimiento. El cuadro de mandos también es negro con gráficas blancas y contrastes en azul eléctrico a juego con las costuras de la tapicería. Sobrio y sin estridencias. Que se note que es un eléctrico moderno pero no demasiado.
En la consola la disposición horizontal de los elementos para ganar amplitud visual se rompe con las agrupaciones de la parte central. De arriba hacia abajo: aireadores, pantalla táctil TFT a color de 7 pulgadas con botones a los lados, mandos de la climatización, arranque y control de temperatura de los asientos y, por último, el selector de marcha por botón y los activadores del e-Pedal y del aparcamiento asistido.
Dimensiones y pesos | ||
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Longitud | 4.480 mm | |
Anchura | 1.790 mm | |
Altura | 1.535 mm | |
Distancia entre ejes | 2.700 mm | |
Ancho de vías delantero | 1.540 mm | |
Ancho de vías trasero | 1.555 mm | |
Altura libre al suelo | 150 mm | |
Coeficiente aerodinámico | 0,28 Cx | |
Neumáticos | 205/55R16 o 215/50R17 | |
Peso | 1.535 kg | |
Ocupantes | 5 pasajeros |
Hasta 378 km de autonomía, 150 CV y una variante más capaz en camino
Las mayores incógnitas sobre el LEAF giraban en torno a la motorización, una cadena cinemática denominada e-powertrain por la marca y que nos promete una mejor respuesta al mismo tiempo que una autonomía incrementada.
Bajo la carrocería del LEAF se encuentra una batería que amplía la capacidad del modelo actual en 10 kWh, hasta 40 kWh, al mismo tiempo que el motor eléctrico también ofrece un mejor desempeño, casi un 50% mejor, al pasar de los 103 CV de la versión saliente hasta unos muy razonables 150 CV (110 kW) y 320 Nm de par motor disponible desde 0 revoluciones.
Con esta nueva dotación y un exahustivo trabajo en el apartado aerodinámico, Nissan asegura haber logrado homologar una autonomía teórica de 378 km con una sola carga según ciclo NDEC. Esta cifra supera el supuesto objetivo inicial de 350 km y sobrepasa por mucho los 250 km (NDEC) del LEAF 30 kWh.
Habrá que ver en cuánto se queda en un uso real, pero la homologación EPA ya recortaba hasta 172 km la autonomía del modelo anterior y una regla de tres nos dejaría al LEAF de 40 kWh con 240 km (EPA). La buena noticia, y esto es importante, es que Nissan traerá a finales de 2018 una segunda versión más potente y con mayor autonomía. ¿Será la rumoreada variante de 60 kWh?
Pero el trabajo de los ingenieros japoneses no se ha quedado sólo ahí. La mejora en prestaciones y autonomía también se apoya en una dieta que si bien no es significativa en términos absolutos, sí refleja un gran trabajo al pasar de 1.591 a 1.535 kg (aunque hay diferencias entre los datos ofrecidos por la propia marca). Una reducción de 56 kg para un coche más capaz, mejor equipado y con mejor insonorización.
Motorización | ||
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Motor | Eléctrico EM57 | |
Batería | Iones de litio | |
Capacidad de la batería | 40 kWh | |
Potencia máxima | 150 CV a 3.283-9.795 rpm | |
Par motor máximo | 320 Nm | |
Autonomía teórica (NDEC) | 378 km | |
Tiempo de recarga | 16 horas a 3 kW o 6 horas a 8 kW (hasta un 80% en 40 minutos en carga rápida) | |
Velocidad máxima | 144 km/h |
Nissan LEAF 2018: Intelligent Mobility
"El nuevo LEAF capitanea la Intelligent Mobility de Nissan, el núcleo de las estrategias de la marca para el futuro", pronunciaba Hiroto Saikawa (presidente y director ejecutivo de Nissan) durante la presentación. Y es que los fundamentos básicos presentados esta madrugada con el LEAF serán el camino a seguir por el resto de la gama nipona.
Entendido como algo más que un simple medio de transporte, la estrategia Intelligent Mobility marca las directrices del transporte que llegará en los próximos años. Una estrategia que no sólo quiere cambiar los vehículos, sino también cómo el ser humano interacciona con el propio coche.
Para hacer del LEAF un coche aún más amable, Nissan ha desarrollado el e-Pedal. Se trata de un sistema opcional que permitirá al conductor activar tanto el acelerador como los frenos desde el mismo pedal derecho. Bastará con presionar el botón que activa el e-Pedal para poder activar la frenada regenerativa y los frenos convencionales hasta detener el coche con sólo levantar por completo el pie del acelerador.
El LEAF se mantendrá detenido mientras no actuemos sobre el pedal, incluso en pendientes pronunciadas, y una vez que volvamos a apretar el pedal el coche comenzará a moverse de forma gradual y con total naturalidad. Pero ojo, esto no quiere decir que se elimine el pedal de freno. Se conservará y deberá ser utilizado para las frenadas más fuertes o de emergencia.
Como ya fue desvelándonos poco a poco Nissan durante los últimos meses, también se incluirán dos tecnologías que harán del LEAF un coche más disfrutable y con una conducción menos estresante. El ProPILOT será capaz de mantener el coche dentro de nuestro carril en tramos de carreteras secundarias y en autovías, y cuando lleguemos a nuestro destino el ProPILOT Park tomará el control de la dirección, el acelerador y el volante para aparcar de forma completamente automatizada.
A nivel tecnológico, Nissan se abre la camisa y saca pecho diciendo que se trata del coche más avanzado que hay dentro de su catálogo. Y no le falta razón, pues es cierto, pero también es verdad que otros coches similares o de segmentos diferentes ya equipan sistemas de conducción pilotada parecidos y más avanzados.
Más que un coche eléctrico, una batería de casa
Además de ser un coche como otros tantos, Nissan quiere que su LEAF permita a sus propietarios jugar un papel determinante en el futuro del mercado de las energías. Conectando el LEAF a la red y utilizando sus baterías como acumulador, los conductores de eléctricos del futuro podrán suministrar energía a hogares que no dispongan de luz.
La firma japonesa quiere que a medida que los eléctricos se popularicen y se extiendan por el mundo, el mercado de la energía se transforme hacia un modelo más eficiente y sostenible. Para ello, las baterías del LEAF podrán actuar como reservas inteligentes, por ejemplo cargándose cuando un hogar alimentado con energías renovables produzca un excedente de energía y aportando kW en franjas de alta demanda. (No sabemos cómo será acogida esta idea por las hidroeléctricas españolas).
Todo este proceso se controlaría de forma inteligente bien desde el propio vehículo, ya que cuenta con todo el hardware y software necesario para programar recargas/descargas inteligentes, o bien desde la aplicación específica desarrollada para smartphone. Con ella, además de ver el nivel de carga de forma remota, podremos manejar la climatización o buscar el punto de recarga más próximo.
Y después de todo esto nos sólo nos falta por saber el precio y cómo se desenvuelve en la vida real. Dos datos fundamentales que pueden ser los puntales para la popularización definitiva de los eléctricos en el mercado.
Bienvenido, nuevo LEAF.