SUV y eléctrico. Estas palabras definen algo más que una moda. Se han convertido en dos tendencias que han afectado de manera estructural a la industria. Los neumáticos no han sido ajenos a los nuevos aires que gobiernan calles y carreteras. Así han evolucionado.
Al igual que se habla de cambios revolucionarios en el desarrollo de nuevos modos de movilidad, el sector del neumático ha tenido que adaptarse apostando por la innovación.
En este caso, no se trata solo de cambiar a un modelo que destierre los materiales derivados del petróleo; o de implementar los procesos industriales para avanzar hacia la descarbonización. Los fabricantes de neumáticos han visto como el desafío crecía para ellos. En ese sentido, compañías como Michelin han sabido responder con agilidad al mercado y a las necesidades de los conductores. Vamos a comprobar cómo.
¿Cómo eran los neumáticos de hace dos décadas?
Esta cuestión se relaciona de forma estrecha con otra: ¿cómo eran los coches hace veinte años? En 2005, la media global otorgaba una cuota a los SUV del 22%. Hoy alcanzan el 46%. Según la Agencia Internacional de la Energía, los SUV consumen y emiten un 20% más de CO2 que sus homólogos de segmento.
Entre los motivos de peso, está el aumento progresivo de su masa. Entre 2001 y 2022, según un estudio de JATO Dynamics, la masa de los vehículos vendidos en Europa se incrementó en un 21% de media. Si en 2001 el peso medio era de 1.328 kilogramos, veinte años después esa cifra ha superado los 1.600 kilogramos.
Los neumáticos han vivido una evolución pareja, tratando de responder a esta tendencia que ha procurado propulsores contundentes y llantas de mayor tallaje, inimaginables hace 30 años. No en vano, el juego energético de la gestión del impulso culmina de forma ineludible en el contacto crucial entre el neumático y el firme.
En este caso se podría afirmar que el tamaño importa. Es relevante para la seguridad, para la eficiencia y, en definitiva, condiciona en buena medida la experiencia de conducción. El crecimiento de los SUV (y de las llantas) ha terminado por procurar neumáticos de mayores diámetros, banda de rodadura más anchas y perfiles algo más bajos.
En los primeros compases que vivieron los SUV en el mercado, los fabricantes se centraron en incrementar la seguridad y potenciar las características mixtas de los todocaminos.
La evolución de la familia de neumáticos Latitude Sport satisfizo una necesidad que, por cierto, también se ha dado en otros vehículos como las motos, en los asistimos al lanzamiento de neumáticos perfeccionados para salvaguardar la seguridad en suelos y condiciones de conducción cada vez más heterogéneas. Tal es el caso de las Michelin Anakee Adventure.
Retomando la historia con los SUV, esta, como bien sabemos, no quedó ahí. Si el perfil tiene una influencia directa en cómo sentimos el firme, la banda de rodadura impacta sobre los consumos y las emisiones. Por ejemplo, en este estudio de la EPA de EEUU, queda patente cómo la eficiencia decae como mínimo un 4,9%. Además, el mayor peso de los vehículos también provoca un mayor desgaste. Pueden llegar reducir la vida útil en un 30% más rápido.
Así se ha mejorado la eficiencia y la seguridad
Como se puede comprobar, los fabricantes de neumáticos se han enfrentado a un reto mayúsculo y complejo. Michelin ha concentrado buena parte de sus esfuerzos en los últimos años en desarrollar neumáticos que ofrezcan una baja resistencia a la rodadura.
En la concepción de gomas como los Michelin e-Primacy, dirigidas tanto a turismos como SUV híbridos o eléctricos, se ha buscado optimizar los componentes utilizados en la fabricación, de cara a disminuir la energía que absorben. Se ha trabajado también en las capas internas y en el diseño de la banda. Todo, además, tratando de ponderar la mejora en la eficiencia con la seguridad vial, conservando las condiciones óptimas de adherencia.
El fabricante francés estima que el e.Primacy reduce la resistencia promedio del mercado en hasta 2 kg/t (un 27% en su categoría), lo que puede suponer un ahorro en combustible que puede superar perfectamente los 0,2 l/100 km. Si hablamos de dióxido de carbono, las mejoras de este neumático ahorrarían 174 kilogramos de este gas a la atmósfera a lo largo de su vida útil.
Michelin explica que en una década la reducción de la resistencia a la rodadura de sus neumáticos ha librado a la atmósfera de 8,7 millones de toneladas de CO2. Esperan que de aquí a la próxima década la reducción se incremente en un 10%.
¿Necesitan unos neumáticos específicos los coches eléctricos?
Sin embargo, el desafío del peso no es el único que ha hecho variar la naturaleza de los neumáticos. Las cada vez más frecuentes motorizaciones eléctricas han permitido aplicar esas mejoras de la eficiencia a este tipo de vehículos, contribuyendo a incrementar su autonomía eléctrica.
La gestión del peso y el centro de gravedad también difiere para los coches eléctricos. En este punto, no solo se trata de optimizar compuestos, sino de aplicar las mejoras al dibujo o su profundidad.
Todo ello incide sobre un aspecto fundamental del coche eléctrico. Su potencial de aceleración es mucho mayor que el del resto de vehículos. El agresivo e instantáneo par repercute sobre la cubierta. Los fabricantes han tenido que acometer un esfuerzo para reforzar la seguridad y mejorar la eficiencia.
Otro aspecto añadido sobre el que se trabaja es en la reducción de ruidos. No en vano, el 70% del ruido en un coche eléctrico procede de la rodadura.
Así, Michelin ha aplicado a buena parte de su gama las especiales características que han de presentar los neumáticos para coches híbridos y eléctricos. Más allá de la familia Primacy, encontramos soluciones específicas en la gama Pilot Sport; o en los diseñados para condiciones climáticas adversas, los Alpin y los Crossclimate, que también han sido implementados pensando en el impulso eléctrico.
Estos últimos, además, han servido de demostración de cómo conciliar las tendencia SUV y eléctrica, con su incorporación a los crossover eléctricos de fabricantes referentes.
¿Cuánto pueden mejorar la autonomía de los coches eléctricos los neumáticos?
Por fortuna, esta es una cuestión que puede comprobarse de forma relativamente sencilla. Y así lo han hecho infinitud de estudios en los últimos años. Tanto fabricantes pioneros como Michelin, como otros realizados en el seno de la industria, demuestran que la autonomía eléctrica puede verse incrementada en torno a un 10% de media si se utilizan neumáticos específicos como los e-Primacy.
Las innovaciones que mueven la rueda
Como se ha mencionado, la estrategia del fabricante de neumáticos va más allá. Con la sostenibilidad como objetivo primordial, plantean como meta alcanzar una cuota de uso del 40% de materias primas renovables en 2030, para llegar al 100% en 2050, año en que alcanzarían la descarbonización plena.
Lejos de ser solo promesas a largo plazo, lo interesante de Michelin es que ha pasado a la acción con varios prototipos de neumáticos prometedores. VISION, presentado en 2017, representa ese impulso con un neumático-rueda que prescinde del aire. Está sensorizado para transmitir información sobre su estado en tiempo real, se puede imprimir en 3D (y permite su recuperación parcial por la misma vía) y solo se fabrica con materiales orgánicos.
Antes que VISION, llegará UPTIS, que comparte algunas características con el anterior. Entre ellas, la de ser un neumático-rueda sin aire que ataca varios de los defectos de las gomas actuales. Y es que, según Michelin, "el 20% de los neumáticos se desechan prematuramente debido a pinchazos y reventones (12%) o al desgaste irregular causado por una presión deficiente (8%)".
El proyecto con UPTIS parece ir más rápido de lo esperado. Este mismo año se van a realizar las primeras pruebas en colaboración con la empresa DHL, realizando repartos en Singapur con vehículos equipados con este neumático que no pincha.
¿Qué tener hoy en cuenta para elegir neumático?
En la elección del neumático, aparte de las características básicas del tipo de vehículo, influye el uso que vayamos a otorgarles. En ese sentido, no es lo mismo un tránsito exclusivamente urbano, como otro en vía interurbana con condiciones climatológicas adversas. En la elección de neumáticos para SUV querremos tener en cuenta, entre otros, cinco factores:
- Su adherencia y comportamiento en frenado en diferentes circunstancias y estaciones.
- La duración de su vida útil.
- La protección que prestan frente al aquaplaning.
- La eficiencia que proporcionan.
- El nivel de ruido.
En ese sentido, la gama de fabricantes de referencia como Michelin nos pone las cosas más fáciles al haber desarrollado una estrategia por la eficiencia, seguridad y la experiencia de conducción adaptada a las diferentes tipos de vehículos; diversificando las soluciones y apostando por la investigación para lograr mejores resultados.