MINI ha querido comenzar el nuevo año dando caña. Para ello ha participado en un nuevo reto. Consistía en coger un MINI Countryman de carreras, preparado por MINI Motorsport y en manos del piloto francés Guerlain Chicherit para lograr lo que sobre el papel parece imposible.
Se trataba de hacer un backflip completo sin más ayuda externa que una rampa de lanzamiento y la propia inercia que adquiere el vehículo. Todo ello en una zona de carga marítima llena de contenedores que a su vez harán de soporte para esa rampa.
Siendo muy hábiles y para conseguir mayor repercusión de este vídeo, en MINI nos muestran el salto solo hasta la mitad. En breve mostrarán el salto completo, con despegue y aterrizaje incluído, y nos imaginamos que si han hecho público este inicio del salto será porque todo ha salido según lo previsto.
No es la primera vez que se intenta conseguir algo así. El neozelandés Rhys Millen lo intentó dos veces con el apoyo de Red Bull, la primera vez se rompió cinco vértebras durante los entrenamientos, mientras que la segunda vez falló en la caída.
En cuanto tengamos el vídeo completo, sea un éxito o un fracaso, os mostraremos las imágenes. Un salto así pasará a la historia por ser el primero en conseguir un backflip en un coche...o por ser uno más que falla.