La hoja de ruta de Mercedes-Benz pasa por una electrificación progresiva de su gama, y en el Salón de Frankfurt de 2019 el fabricante alemán ha presentado el que será su siguiente paso con el Mercedes-Benz Vision EQS.
Esta berlina grande 100% eléctrica no sólo representa la propuesta de movilidad eléctrica en el segmento E, sino también un teaser sobre cómo será el diseño de los próximos coches de Mercedes-Benz, ya sean eléctricos o de combustión.
Vision EQS: el Clase S del futuro es sostenible e inteligente
Las formas del Mercedes-Benz Vision EQS toman las líneas maestras de Mercedes-Benz y las llevan un paso más lejos. Esta berlina adopta líneas de coupé pero con un énfasis especialmente marcado en la línea curva que delimita por encima el habitáculo, totalmente continua. Una vista lateral que se refuerza con un capó extremadamente bajo, llantas enormes y unos hombros marcados y elevados.
Por delante todo el frontal prácticamente está protagonizado por una parrilla enorme similar a la del resto de EQ que ya conocemos, pero iluminada con 188 LED. En la parte trasera los genes de concept car relucen con unos pilotos casi ocultos en la carrocería (229 estrellas luminosas independientes) y un difusor enorme.
Todo el coche está condicionado por la pintura en dos colores (plateado en la zona inferior y negro brillante que simula ser cristal en la superior) que enfatiza la sensación de que el coche es extremadamente bajo. Las llantas de gran diámetro ayudan a crear aún más sensación de solidez sobre el asfalto.
Las virguerías tecnológicas del Mercedes-Benz Vision EQS incluyen faros Digital Light integrados en una banda luminosa que recorre todo el contorno del vehículo o el sistema de inteligencia artificial que ha evolucionado hasta convertirse en Advanced MBUX, con una experiencia de inmersión total para los ocupantes.
El interior se ha inspirado en el mundo de los yates de lujo y utiliza soluciones nunca antes vistas como un cuadro de mandos integrado en una suerte de escultura. El salpicadero simula la cubierta de un barco mientras que la consola central tiene una gigantesca pantalla. Todo el interior está realizado con materiales sostenibles y reciclados.
A nivel mecánico el Mercedes-Benz Vision EQ es un coche equipado con dos motores eléctricos, uno para cada eje, para conseguir una tracción integral variable. La firma alemana ha apuntado que la potencia será superior a 350 kW (470 CV) con un par motor máximo de 760 Nm, con los que puede alcanzar los 100 km/h desde parado en menos de 4,5 segundos.
Las baterías de iones de litio se ubican en el suelo del vehículo y tienen una capacidad de unos 100 kWh, suficientes para aguantar una autonomía aproximada de 700 km (según ciclo WLTP). El tiempo de recarga anunciado para el 0-80% es de 20 minutos conectado a un punto de carga de 350 kW.
Lo más relevante de esta motorización es que está concebida de manera modular para poder escalar el tamaño de las baterías y usar diferentes motores de manera que puedan adaptarse a diferentes tipos de vehículos.