En el Salón de Frankfurt también habrá cabida para las preparaciones y una de las que allí se podrán observar será este Brabus 850 G63 AMG 850 Widestar. Uno de esos coches sin sentido pero que levantan pasiones. Y es que ¿asfaltizar de esta manera uno de los mejores (y escasos) todoterrenos de verdad que tiene sentido? Yo no lo veo, pero si te digo la verdad, por otro lado me gusta.
La subida de potencia supera al ya existente Widestar 700 para alardear de 850 CV, que si no te parece una burrada a ver qué piensas cuando te diga que tiene un par motor máximo de 1.450 Nm... Y es que lo de Brabus no se han andado con chiquitas para hacer de este todoterreno de más de 2,5 toneladas un coche muy rápido.
Se ha aumentado la cilindrada hasta los seis litros con unos nuevos pistones forjados, se ha reforzado el cigüeñal y modificado la culata, tiene nueva admisión, escape y dos turbocompresores más grandes. Para gestionar este poderío se confía en una caja de cambios Speedshift Plus 7G-Tronic y para que no se descontrole lleva suspensión Ride Control con amortiguadores Bilstein regulables.
Llantas de 23 pulgadas, kit de carrocería, toma de aire en el capó de fibra de carbono y un largo etcétera para hacer del robusto Clase G una auténtica bestia por dentro y por fuera.