Tal y como estaba previsto, el político del Partido Popular José Luis Martínez-Almeida se ha convertido en nuevo alcalde de Madrid y ha introducido el cargo de vicealcaldesa para Begoña Villacís, de Ciudadanos. El hecho de que las nueve áreas de Gobierno recaigan sobre dos bloques de derechas -y probablemente con influencia de la ultraderecha- implica que medidas como Madrid Central sufran importantes modificaciones.
De momento, Martínez-Almeida ha anunciado una moratoria de multas a partir del 1 de julio, por lo que "se podrá circular por Madrid Central".
La ultraderecha propone soterrar la Gran Vía
En una entrevista con El Mundo, Martínez-Almeida ha vuelto a poner sobre la mesa que el proyecto estrella de Manuela Carmena, Madrid Central, "ha fracasado" y que a partir de ahora se dará forma a una propuesta a caballo entre lo que quiere Ciudadanos (reconvertir) y lo que quiere Vox (recuperar la libre circulación).
El alcalde ha asegurado que se permitirá la circulación de los vehículos en los ejes estructurales del distrito centro; es decir, se volvería al proyecto que se diseñó durante el mandato de Ana Botella y que puso en marcha cuatro áreas de prioridad residencial en Ópera, Letras, Cortes y Embajadores a las que solo podían acceder residentes, invitados y repartidores.
Se permitía además el tránsito libre -sin criba por etiqueta medioambiental de la DGT- por Gran Vía, Atocha y San Bernardo, y es más que probable que vuelva a ser así.
El pasado 16 de marzo se pusieron en marcha las multas en Madrid Central. Las sanciones eran hasta ahora de 90 euros, pudiendo reducirse a 45 euros con el pronto pago con un margen de 20 días naturales desde el momento en el que se recibe la notificación.
No obstante Martínez-Almeida ha reconocido que la contaminación "es un problema en la ciudad" pero que la lucha para combatirla no se centrará en prohibir la circulación de ningún coche, por lo que se creará un nuevo modelo.
También ha anunciado que el partido de ultraderecha Vox, cuyo apoyo ha hecho posible su ascenso a la alcaldía, ha propuesto construir un túnel subterráneo por la Gran Vía con aparcamientos. Una propuesta que será estudiada sin "ningún problema", según el popular.
En cuanto a las obras de remodelación de Plaza de España, que actualmente están paralizadas, Martínez-Almeida ha asegurado que la intención del PP es reanudarlas ya que el contrato está adjudicado.
Recordemos que el pasado 5 de Junio la Comunidad de Madrid paralizó las obras argumentando que dichas actuaciones carecen del necesario "control y seguimiento arqueológico y paleontológico de los movimientos de tierras".
El proyecto de la nueva Plaza de España abarca una superficie de 70.450 metros cuadrados de los que casi 60.000 están destinados a los viandantes, con especial hincapié en personas con movilidad reducida y zonas de juego infantil, además de 1.675 metros cuadrados para carriles bici.
Mientras, España continúa en moratoria ante una multa de la Comisión Europea por incumplir los objetivos de emisiones fijados por el Gobierno comunitario. Un expediente de infracción paralizado gracias a Madrid Central.