Aunque parezca mentira, no todo está inventado en el sector del automóvil. Más allá de las novedades en materia de diseño, tecnología y propulsión, hay nuevas fórmulas que cambian la forma de “consumir” coches.
Es el caso del renting o el leasing, también de la financiación o de la denominada compra flexible. Pero hay más. Un tiempo después de que se popularizase en el sector del entretenimiento, el modelo de suscripción está llegando al automóvil.
Hay una marca que está apostando especialmente fuerte por ello: Lynk & Co. Y no es lo único nuevo que propone, hasta el punto de que sus responsables no la definen como una marca de coches.
Lynk & Co pertenece al grupo Geely, como Volvo y Polestar
Mientras los fabricantes de coches tradicionales asimilan (algunos demasiado tarde) que eso de “renovarse o morir” es más importante que nunca, llegan nuevas marcas que en tiempo récord están comiéndose el mercado mientras no paran de poner contra las cuerdas a las firmas de toda la vida.
Una de ellas es la estadounidense Tesla y el resto, casi en su totalidad, vienen de China. Todas tienen algo en común, además de apostar en mayor o menor medida por la electrificación: hacen las cosas de forma diferente.
Gracias a ello, Tesla, a pesar de su juventud, lidera las listas de ventas, mientras que los grandes grupos chinos amenazan con conquistar Europa y relegar a las compañías tradicionales a un segundo plano. Es el caso del gigante Geely, que ya es dueño de marcas históricas como Volvo, Lotus o Smart, pero también ha creado nuevas firmas, como Polestar o Zeekr.
Otra de las marcas que ha creado Geely es Lynk & Co, pero lo cierto es que tiene poco que ver con el resto de las firmas del grupo. Es más, tiene poco que ver con cualquier marca, en general.
A estas alturas es más que probable que te hayas cruzado con algún Lynk & Co 01 por la calle, sin embargo, no habrás visto ningún concesionario ni anuncios tradicionales en prensa, radio o televisión. Y tiene una explicación: no hay, ni lo uno ni lo otro. Sin embargo, en 2022 se matricularon en España 2.824 unidades de este modelo, el único disponible en nuestro país, de momento.
Y hay que hacer hincapié en la palabra “matricularon”, en lugar de decir “vendieron” porque esto último no sería correcto. Al menos no del todo. Y es que Lynk & Co, a diferencia de Volvo o cualquier marca convencional, no basa su negocio en vender coches.
Si alguien quiere comprar un Lynk&Co 01 nuevo puede hacerlo, pero también existe la posibilidad de disfrutarlo mediante una suscripción, a través de renting o de car sharing. Es decir, existen varias posibilidades de tener un Lynk & Co “sin tener” un Lynk & Co.
El primer caso, el de la suscripción, es similar a Netflix o Amazon Prime: pagas una cuota mensual para utilizar el coche. La cuota depende del tiempo de la suscripción y de los kilómetros que se vayan a realizar y el coche que proporciona Lynk & Co no tiene por qué ser nuevo, pero siempre se garantiza que “está en perfecto estado”.
La suscripción incluye todo, desde el seguro, hasta el impuesto de circulación, el mantenimiento y las posibles averías. Cuando decidas cancelar la suscripción, devuelves el coche y dejas de pagar.
No hay más complicaciones y tampoco letra pequeña. Tampoco es un compromiso a largo plazo porque puede terminarse en cualquier momento, por lo que viene bien a esas personas que no quieren ataduras a la hora de tener coche.
La suscripción está disponible por 600 euros al mes, a lo que hay que sumar una tarifa de inscripción de 200 euros. Por ese precio, Lynk & Co incluye 1.250 km al mes acumulables e incluye los servicios conectados.
Echando cuentas, en un año se pagarían 7.200 euros (más los 200 euros iniciales) y se podrían recorrer 15.000 kilómetros. Como el mantenimiento, las averías, el seguro a todo riesgo y los impuestos están incluidos, solo habría que pagar por la gasolina y la electricidad que se consuma.
Es muy cómodo, pero tampoco es una tarifa al acceso de todo el mundo y también hay que tener en cuenta que es pago por uso y en ningún momento se tiene la propiedad del coche. También es verdad que no hablamos de un modelo low cost, sino de uno SUV que puede mirar de tú a tú al Volvo XC40 con el que está emparentado y que viene francamente bien equipado.
Otra cosa que hay que tener en cuenta con la suscripción es que se tiene que pagar un extra por cada kilómetro que se recorra de más respecto a los 1.250 km incluidos en la tarifa. Es una distancia que superan fácilmente muchos conductores cada mes, por lo que se antoja un poco corta. Otros, en cambio, no llegarán a recorrer esos 1.250 km al mes. Es cuestión de hacer números.
Eso sí, el coche es como las lentejas, “o las tomas o las dejas”: solo hay una versión disponible, siempre con un único nivel de acabado y con un motor híbrido enchufable de gasolina que desarrolla 261 CV, ofrece hasta 75 km de autonomía eléctrica y tiene la etiqueta CERO. Solo se puede elegir el color exterior y nada más hay dos opciones: azul y negro.
Hay quien lo verá como una ventaja, pero otros echarán en falta opciones de personalización, sobre todo ahora que están tan de moda en tantas marcas.
Lynk & Co no se ha complicado la vida y ha buscado la máxima simplicidad. Es una apuesta arriesgada, pero el 01 es un buen producto y lo cierto es que no se echa absolutamente nada en falta al conducirlo, a pesar de que es todo un veterano porque se lanzó en 2017.
Comparte casi todo con su primo, el Volvo XC40, pero es unos centímetros más largo (mide 4,54 metros) y eso le permite ampliar el espacio para las piernas en la parte trasera y montar una batería de iones de litio más grande para ampliar su autonomía eléctrica. Por supuesto, el diseño también es propio.
En marcha va igual de bien que el Volvo, por dentro no tiene nada que envidiar a su pariente sueco en lo que respecta al nivel de calidad y su equipamiento es muy completo. Además, aprovecha muy bien el espacio interior.
Hay sitio para opciones más tradicionales
Lynk & Co ofrece otra opción de utilizar el 01: el renting. En este caso, estrenas coche, pero las condiciones son diferentes. Es una fórmula más tradicional que la suscripción, pero cada vez tiene más peso, no solo en el canal de empresas, sino también en el de particulares, y Lynk & Co no quiere perder su trozo del pastel
La gran diferencia con la suscripción es que sí tiene compromiso: la suscripción puede cancelarse en cualquier momento, pero el renting tiene una duración de 36 meses, 48 meses o 60 meses.
El contrato también incluye un kilometraje de 10.000, 15.000 o 20.000 kilómetros anuales, se puede elegir cualquiera de las tres opciones, independientemente del plazo de tiempo escogido. Los precios arrancan en 498 euros al mes, IVA incluido.
También incluye el mantenimiento, las reparaciones mecánicas, la sustitución de neumáticos, la asistencia en carretera y una póliza de seguro a terceros. El coche es el mismo, el 01 con un solo motor, un solo acabado y dos colores.
Hay una tercera opción, la más tradicional de todas: la compra. Como en las otras dos, lo único que se puede elegir a la hora de encargar el coche es el color exterior: azul o negro.
Por supuesto, el coche es nuevo y su precio es de 44.500 euros, IVA incluido y con cuatro años de garantía o 120.000 kilómetros, lo que antes suceda. A esa tarifa habría que sumar las ayudas del Plan MOVES III, si es que el cliente puede beneficiarse de ellas.
Puede encargarse por internet y Lynk & Co asegura que el coche se entrega al cliente en un periodo de 5 a 7 semanas. De momento, los coches se entregan sin cargo en A Coruña, Barcelona, Bilbao, Madrid, Málaga, Palma, Sevilla, Valencia, Alicante y Zaragoza. Con un cargo de 150 euros se entrega en cualquier punto de la península y Mallorca.
Romper moldes, no solo con el coche
Lo que no puedes esperar es recoger tu 01 en un concesionario de Lynk & Co porque no existen. La marca ha apostado por otra fórmula: permite llevar sus coches a los servicios oficiales de Volvo para hacer el mantenimiento y solucionar cualquier avería, pero, en lugar de tener concesionarios tradicionales propios, cuenta con Clubs.
Son establecimientos que no tienen nada que ver con un concesionario. Si bien es cierto que en todos ellos hay una unidad del Lynk & Co 01, se trata de espacios diseñados para que la comunidad de Lynk & Co (y todo el que lo desee) pase tiempo con otros miembros.
En España, el club de Barcelona está abierto desde hace un tiempo y en enero se inaugurará el de Madrid. Como hemos podido comprobar en el de Gotemburgo, Suecia, son espacios en los que el diseño juega un papel muy importante y su aspecto recuerda más a una cafetería del estilo de Starbucks que a un concesionario.
Todo el mundo puede entrar, ya sea para mantener una reunión de trabajo, para pasar un rato leyendo, para tomar un café, para compartir un rato con amigos, para conocer a otros miembros de la comunidad de Lynk & Co y, por supuesto, para conocer el Lynk & Co 01. También hay todo tipo de eventos, desde proyección de documentales hasta talleres.
Lynk & Co se ha propuesto romper moldes en un sector en el que “está todo inventado” desde hace más de 100 años y lo está consiguiendo. No solo con la posibilidad de acceder a su coche a través de la suscripción, sino también con estos Clubs que, poco a poco, están ayudando a crear una comunidad en torno a la marca.
Y la verdad es que, con los números en la mano, funciona. En el acumulado de enero a octubre de 2023, el Lynk & Co es el híbrido enchufable que más se ha matriculado en España, con 3.750 unidades. Se vende más que el Opel Mokka, que acumula 3.629 unidades, y está muy lejos de las 1.973 unidades de su primo, el Volvo XC40 PHEV, que ocupa la quinta posición de la tabla de ventas de híbridos enchufables.
El segundo PHEV más vendido en España en lo que llevamos de 2023 es el Ford Kuga, con 3.486 unidades, mientras que del tercero, el Peugeot 3008, se han matriculado 2.186 unidades y del cuarto, el Kia Sportage, 2.039 ejemplares.
Los números del Lynk & Co, por lo tanto, son buenos, al menos si hablamos de híbridos enchufables porque si tomamos como referencia las cifras de matriculaciones de enchufables, en general (eléctricos + PHEV), vemos que Tesla ha matriculado 5.095 unidades del Model Y y 3.635 unidades del Model 3.
A estas alturas, los coches 100% eléctricos han ganado mucho peso y se echa en falta que Lynk & Co ofrezca un modelo de este tipo en Europa. Lo tendrá, pero no puede seguir mucho tiempo apostándolo todo a un híbrido enchufable si quiere seguir creciendo en nuestro mercado, por lo que ese Lynk & Co eléctrico debería ver la luz muy pronto.
Más allá de las matriculaciones, cada vez es más habitual ver unidades del Lynk & Co 01 en las ciudades y carreteras españolas. Para conseguirlo, Lynk & Co tiene un cuarto as en la manga: además de la suscripción, el renting y la compra tradicional, ofrece un servicio de car sharing.
La diferencia con otros servicios de coche compartido radica en que los usuarios del Lynk & Co 01 comparten su propio coche, e incluso establecen sus propias tarifas, todo ello a través de la app de Lynk & Co.
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