Buen documento para resumir las desgracias que te pueden suceder en un rally. Para empezar, una salida de pista que rompa o tuerza el eje delantero, toque la suspensión, o cualquier otra cosa que haga que el coche no gire.
Después de recibir la ayuda del público, pide a tu copiloto que se siente sobre el capó para conseguir agarre en el tren delantero, más bien en la parte derecha, y poco a poco, sin forzar, intenta llegar a la asistencia (cuantas veces lo habré visto en aquéllos rallyes gallegos de tierra).
Eso sí, no fuerces, o volverás a tener un toque y podrás volcar con copiloto y todo, y puede que llegues a desgraciarlo en el intento. ¿Qué más te puede pasar? ¿Que te ataque una vaca cabreada?