Al igual que nos hacemos eco del buen desempeño de las firmas en las pruebas de choque de organismos internacionales, queremos tener presentes y localizados aquellos que fracasan estrepitosamente. Entre los ejemplos más notables encontramos la Chevrolet Enjoy, comercializada en India, el Kia Rio Sedán y el Chevrolet Onix, líder en Brasil o el Dacia Duster, también comercializado en India.
El denominador común son cero estrellas Global NCAP y Latin NCAP, y hay más. El Programa de Evaluación de Vehículos Nuevos para América Latina y el Caribe, Latin NCAP, no ha podido otorgar ni una sola estrella al Ford Ka para la protección de ocupante adulto. No aprobaría la norma básica de protección contra impactos laterales de las Naciones Unidas (UN95), obligatoria en Europa desde 1995.
Cuatro estrellas en 2015
El Ford Ka (dos airbags de serie) ya fue sometido a las pruebas de choque en 2015, obteniendo bajo el anterior protocolo de seguridad cuatro estrellas. Presentaba buena estructura en el impacto frontal, aunque el airbag del conductor no lograba desempeñar su función. Al repetir las pruebas con impacto lateral de acuerdo a los nuevos protocolos de evaluación (2016), se ha encontrado con graves deficiencias (incluso la puerta trasera se abre tras el impacto, exponiendo a los niños y otros ocupantes).
El devastador efecto del impacto lateral en el pecho del adulto determinó la desastrosa evaluación; la barrera penetra profundamente en habitáculo a través del pilar B, causando graves daños en el pasajero adulto. La protección de los niños sin embargo ha tenido una buena puntuación en el impacto lateral: tres estrellas.
La protección infantil fue aceptable durante la prueba de choque, sin embargo el modelo no ofrece cinturones de tres puntas en todas las posiciones, la señalización de anclajes ISOFIX es deficiente y no ofrece la posibilidad de desconectar la bolsa de aire del pasajero al instalar un Sistema de Retención Infantil (SRI) mirando hacia atrás, motivos adicionales para la reducción de puntos.
Tal y como informa el organismo, el Ka no ofrece dispositivos de absorción de energía de impacto lateral en su estructura ni en el panel interior en las puertas. Teniendo en cuenta los resultados de las pruebas, el sedán no aprobaría la norma básica de protección contra impactos laterales de las Naciones Unidas (UN95), obligatoria en Europa desde 1995.
Es el tercer vehículo más vendido en Brasil. El resultado del Ford Ka es válido para al modelo Ford Figo/Aspire comercializado en México, Costa Rica, El Salvador, Guatemala, Honduras, Nicaragua y Panamá.
¿A quién culpamos? ¿A los fabricantes o a los gobiernos?
El Secretario General de Latin NCAP, Alejandro Furas, describe así los resultados:
"Estamos sorprendidos de que una vez más un fabricante tan importante como Ford venda un auto de cero estrellas en Latinoamérica, que incluso fallaría en las pruebas básicas de la norma de protección contra impactos lateral de la ONU. Los compradores de automóviles merecemos mucho más que este resultado inferior al estándar mundial de parte de las compañías que saben perfectamente cómo producir automóviles mucho más seguros. Este mal resultado debería servir como una lección para los gobiernos de toda la región, ya que algunos fabricantes aun no pueden proporcionar niveles mínimos de seguridad voluntariamente".
Desde Latin NCAP se hace un llamamiento para que todos los gobiernos de Amércia Latina adopten la certificación de estándares de prueba de choque frontal y lateral de la ONU y, mientras tanto, hagan que las pruebas Latin NCAP sean obligatorias para todos los vehículos.
También merece la pena interiorizar lo que el Presidente de la Comisión Directiva de Latin NCAP, Ricardo Morales Rubio, opina respecto a los resultados:
"La falta de interés en la seguridad por parte de algunos fabricantes en su afán de vender más unidades es inaceptable y debe detenerse. Se necesitan con urgencia acciones comprometidas de los gobiernos para eliminar el flagelo de los autos cero estrellas de la región. Sin las reglamentaciones adecuadas, los fabricantes pueden vender vehículos inseguros que no podrían vender en Europa, Australia, Japón o América del Norte. Latin NCAP cree que este comportamiento demuestra una falla grave en la responsabilidad social corporativa de las empresas".
Seguimos pues con la máxima de "lo que no puedo vender en otros países, lo vendo aquí". Ese "aquí" suelen ser por norma el mercado indio y el latinoamericano, donde fabricantes como General Motors o Kia fabrican vehículos sin airbags, abaratando costes para ajustarse a la demanda y al poder adquisitivo de cada mercado. La pescadilla que se muerde la cola.