Como viene sucediendo en cada uno de los rallyes de tierra de esta temporada, las “peleas” por ser el más lento en la primera jornada fueron de nuevo la tónica de la apertura de este Rally de Turquía, cosa que mosqueó bastante a Sébastien Loeb, quien al final del viernes tuvo el dudoso honor de ser el más rápido, viéndose obligado a abrir pista el sábado.
Pero al final, lo que quedará en la memoria de todos es un último tramo durísimo en el que Hirvonen, Latvala y Loeb han protagonizado una bonita lucha con sus gomas hechas polvo por la victoria, que al final se ha llevado Hirvonen, pese a haber pinchado una rueda en ese decisivo tramo.
La verdad es que Latvala y Loeb han firmado un último día “al ataque” muy interesante, y ya hay malas lenguas que hablan de *órdenes de equipo en Ford* cuando Latvala parece haber aflojado el ritmo en el penúltimo tramo. Pese a todo, Jari-Matti Latvala ha completado el doblete para Ford, dejando en el tercer escalón del podium a Loeb, que pierde el liderato a favor de Hirvonen. Dani Sordo finalizó cuarto tras los problemas de Hennig Solberg el domingo.
Me gustaría destacar la actitud de Sébastien Loeb en la jornada del sábado, cuando pese a tener que abrir pista, no dio su brazo a torcer en ningún momento, y aunque los dos pilotos de Ford acabaron la jornada en el liderato, como era de esperar, veían como Sébastien Loeb estaba a tan sólo 34 segundos de la cabeza, por lo que no iba a ser posible relajarse un pelín en la jornada del domingo. Por algo Loeb es cuatro veces Campeón del Mundo.
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