Hace unas horas ha abierto sus puertras Ferrari Land, el tercer parque temático integrado dentro del complejo de PortAventura World. Llama la atención que un parque temático pensado para toda la familia tenga inspiración en una marca de coches como Ferrari, pero no es el primero en el mundo, ya que también existe el Ferrari World Abu Dhabi.
La montaña rusa más alta y más rápida de Europa, con sus 112 metros de altura y una plataforma que alcanza 180 km/hora en solo 5 segundos es el plato estrella de este parque que cuenta además con un gran sabor a Italia. Pero ¿cuánto hay de marketing y cuánto de ferrarista real en Ferrari Land?
Según la información oficial de PortAventura World sobre el nuevo parque temático, el tercero del complejo y en el que más se ha invertido con sus 100 millones de euros, las familias que visiten el parque "podrán vivir una inmersión en los dos mundos de la marca Ferrari", el de los coches de calle y el de la Fórmula 1 por la que es mundialmente famosa.
Lo primero es conocer la historia de Ferrari
Todos los visitantes tendrán oportunidad de comenzar su visita por el Ferrari Experience, el edificio principal donde además está el Ferrari Gallery donde podrán conocer en detalle cuál es la historia de la marca y de la Scudería Ferrari de Fórmula 1.
Así, si alguno no es demasiado ferrarista, o no conoce en detalle qué hace tan especiales a los coches de Maranello, podrá comenzar a "infectarse" de la bacteria roja que millones de personas por todo el mundo tienen tan interiorizada.
Red Force, sensaciones fuertes aseguradas
Una vez que uno ya tiene interiorizado lo que es Ferrari, cómo y por qué ha llegado a ser lo que es hoy en día como marca y quiere experimentar sensaciones cercanas a las que se viven en sus coches de carreras, lo mejor es ir al Red Force.
Será fácil encontrarla porque es la montaña rusa más alta de Europa y sus curvas son visibles a varios kilómetros de distancia. En Red Force podrán sentir las fuerzas G ya que su acelerador vertical permite pasar de 0 a 180 km/h en cinco segundos, tiempos dignos de un Fórmula 1 e inalcanzables por cualquier Ferrari de calle.
Este tipo de parques están pensados para toda la familia, por lo que hay otras atracciones menos fuertes como la que te permite hacer un recorrido de medio kilómetro montado en una maqueta de un LaFerrari.
Un pit stop como atracción
Otra de las atracciones de Ferrari Land será el pit stop. Los visitantes podrán ponerse en la piel del equipo de mecánicos de la Fórmula 1 teniendo que hacer un cambio de neumáticos de un coche a escala real.
También habrá ocho simuladores que dicen son muy similares a los que utilizan los pilotos oficiales de la Scudería Ferrari para entrenar. Esos estarán reservados para mayores, mientras que los más pequeños tendrán otros simuladores adaptados a sus necesidades.
Todo el recorrido entre las ocho zonas que conforman Ferrari Land lo harán como si estuviesen en la misma Italia, ya que la inspiración y la decoración de las calles simulan la arquitectura italiana e incluso se han reproducido edificios de Maranello.
El sabor a Italia lo pondrán la Trattoria Italiana, los restuarantes de fast food o las heladerías que tanta fama han dado al país transalpino.
Una pasada inevitable por la tienda Ferrari
Las tiendas Ferrari están repartidas por todo el mundo. Aunque las dos que Ferrari tuvo en Madrid cerraron al poco tiempo de abrir, en el Ferrari Land podrás acabar la visita en una de esas tiendas donde puedes comprar todo tipo de objetos de la marca.
Desde maquetas de sus coches con precios que van desde los 30 euros hasta los 4.500 euros, ropa de la marca, accesorios y objetos de decoración, las tiendas Ferrari son el sitio perfecto para perder el sentido (y el dinero) y salir cargado de detalles que recuerdan a la marca de Maranello.
¿Marketing o ferrarista?
Nos hacíamos esta pregunta a la hora de hablar de Ferrari Land. ¿Cuánto hay de marketing y cuánto de ferrarista real en Ferrari Land? A decir verdad, creemos que es una mezcla entre ambas cosas bastante equilibrada.
Los ferraristas de toda europa peregrinarán a Ferrari Land para vivir una experiencia única e irrepetible, como lo es visitar Maranello o conocer el Museo Ferrari. Además en este caso, la disculpa de hacerlo en familia es perfecta, ya que el parque temático está pensado para que todos puedan disfrutar de la visita, no solo los tifossi.
Por otro lado, está claro que este tipo de acciones generan mucho reconocimiento de marca. Ferrari es una marca mundialmente conocida por jóvenes y mayores, hombres y mujeres, amantes de los coches o gente que no tiene ningún interés por el automóvil.
Es una marca que además, por su propia naturaleza, se identifica con las sensaciones fuertes, con la adrenalina y con el mundo de la competición. Por eso, es cierto que hay un punto muy importante de marketing en Ferrari Land.
De lo que no tengo duda, es que se trata de un marketing positivo, ya que los niños que visiten Ferrari Land posiblemente sueñen el resto de su vida con ver algún día un Ferrari por la calle y, por qué no, con llegar a comprarse uno. Esto genera pasión por el automóvil.
Eso, en los tiempos que corren en los que en un conocido anuncio de coches un niño alardea de que el coche de su padre tiene WiFi como principal característica, frente a los de sus amigos que hablan de V8 o Turbo, creo que es muy positivo. Y no solo para Ferrari, sino para el mundo en general.
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