El uso que vamos a hacer del coche es uno de las características fundamentales a la hora de elegirlo, si tenemos hijos buscaremos un coche amplio en el que no haya problema en poder meter una o varias sillas infantiles.
El sistema de anclaje y sujeción de estas sillas ha sido de lo más variopinto. En muchos casos había que hacer casi una ingeniería para sujetar la silla bien, quedando mal sujeta en muchas ocasiones, lo que comprometía enormemente la seguridad del niño. Todo esto cambió con la llegada del sistema ISOFIX que estandarizó el sistema de anclaje de las sillas de los niños.
¿Qué es el sistema ISOFIX?
El sistema ISOFIX en un sistema estandarizado dos anclajes que están atornillados o soldados sujetos directamente a la carrocería del vehículo y que permiten anclar la sillita del niño o, como técnicamente se llama, el SRI (Sistema de Retención Infantil).
Este sistema fue montado por primera vez por Volkswagen en su Golf IV en el año 1997 y es obligatorio en todos los coches nuevos desde agosto de 2010. No se trata de un sistema obligatorio, los coches fabricados anteriormente no tienen por qué llevar este sistema, al igual que hay coches de antes de 2010 que ya llevaban implementado el sistema ISOFIX aunque no fuera obligatorio.
La idea de esta estandarización es simplificar el montaje de los SRI, evitando de esta manera errores en el montaje o tensado cuando hay que sujetar la silla infantil, haciendo que las sillas sean más seguras de cara a un frenazo o a un accidente.
Este sistema de seguridad se encuentra en los asientos traseros entre el respaldo y la banqueta, la etiqueta ISOFIX vendrá cosida a los asientos o aparecerán con una carcasa de plástico desmontable que actúan como embellecedor y a la vez lo protege.
Este sistema de anclaje se debe complementar con otro anclaje que puede ser de tres tipos:
- Top Tether: Fijación que suele estar en la parte posterior del asiento (en muchos coches instalado en el suelo del maletero)
- Lower Tether: Esta fijación está formada por dos agarres y está en el suelo del vehículo.
- Pata de apoyo: En el caso de no disponer de las dos fijaciones anteriores, se trata de una pata que se apoya sobre el suelo para que la silla no vuelque.
Hay que fijarse que el coche que compramos tiene este tipo de fijación y que la silla que compramos también la tenga y que, además, se adecúe a las características y edad del niño. Es fundamental que la silla esté homologada y montarla correctamente, para que el más pequeño de la casa viaje de la manera más cómoda y segura posible.
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